MIAMI (AP) _ Un juez federal le ordenó a un banco entregar más de 91 millones de dólares en fondos cubanos congelados a dos familias que ganaron una demanda por daños contra el gobierno de Cuba, que ejecutó a sus familiares hace más de 40 años.

El juez federal Víctor Marrero falló el viernes en Nueva York que el Banco JP Morgan Chase debe entregar 67 millones de dólares a la familia de Howard Anderson, fusilado en Cuba luego de la invasión de Bahía de Cochinos en 1961.

La hija de Thomas «Pete’’ Ray, piloto de la CIA, también recibirá fondos por la ejecución de su padre. Janet Ray Weininger, de Palmetto Bay, Florida, es acreedora a 23,9 millones de dólares por el fusilamiento del piloto tras haber sido derribado durante la fracasada invasión.

Los demandantes se apoyaron en una ley de 1996 que permite a las víctimas de países considerados como terroristas el demandarlos por daños. Ambas familias ganaron demandas en la Corte de Distrito del condado de Miami-Dade en el 2003 y 2004. El gobierno de Fidel Castro no respondió en ninguno de los juicios a las acusaciones de las familias.

El fallo de 101 páginas marca la primera vez en que un estatuto contra el terrorismo del 2002 es aplicado para que las víctimas puedan ser compensadas con los bienes congelados de un país considerado como terrorista.

Y es apenas la segunda vez en que familias de víctimas que han demandado al gobierno cubano por la muerte injustificada de sus seres queridos pueden obtener fondos de cuentas congeladas en Estados Unidos.