Las instalaciones del Complejo Deportivo construido en 1983 para los Juegos Nacional están en un total abandono, lo que impide que los atletas de las diversas disciplinas puedan realizar entrenamientos.
Un progresivo deterioro presentan los pabellones de gimnasia, levantamiento de pesa, karate, yudo, las canchas de baloncesto, voleibol y tennis, los estadios de béisbol y softbol, la pista de atletismo y otras áreas deportivas.
Fernando Whyte, presidente de la Asociación de Gimnasia, lamentó que no se le ponga atención a esas instalaciones, pese a que este complejo deportivo produce atletas de primera competición que representan al país en distintas disciplinas.
A su entender a las autoridades competentes no les interesa mejorar esas instalaciones, y expresó que también presentan problemas el sistema eléctrico, el techo y los pisos.
Además dijo que el complejo deportivo está a oscuras, lo que no le permite a los atletas practicar en horas de la noche.
Esa situación le deja el campo abierto a los delincuentes para que se desplacen a sus anchas y cometan todo tipo de fechorías, afirmó.
Whyte añadió que también la Villa Olímpica, que es para albergar a los atletas, está abandonada, por lo que ninguna asociación puede hacer un intercambio adecuado o un torneo nacional, ya que no cuenta con el mobiliaria requerido.
El dirigente deportivo expresó que el personal de seguridad no es suficiente para la vigilancia de esas instalaciones y, que además la maleza afecta toda el área.
Entiende que debe haber una política de Estado hacia el deporte más consciente, ya que el personal está nombrado, pero no se le da un seguimiento, producto de que hay una inversión a través del Ministerio de Deportes.
Whyte hace un llamado al ministro de Deportes Danilo Díaz para que se interese más por San Pedro de Macorís y se reúna con el movimiento deportivo a fin de discutir la problemática que le afecta y juntos lograr poner esas instalaciones en las condiciones que amerita.
Consideró que de esta forma podrán dar el beneficio que realmente necesita la juventud del pueblo y así hacerle frente a la delincuencia.