El concepto comunicación política es históricamente antecedido por el termino propaganda, propaganda política igual a propaganda de guerra, y hallamos sus orígenes en ese proceso previo a la revolución francesa. Es justo en el proceso de agitación en los clubes, en los comités revolucionarios de donde salieron los primeros discursos, los primeros encargados de propaganda y con ello la primera propaganda de guerra que generó la primera guerra de propaganda.
Desde la revolución francesa vemos todo un ciclo de incubación de la propaganda y la comunicación que se pone al servicio de las ideologías, la política, la religión y el poder. Este proceso muestra sus frutos en la primera mitad del siglo VIX, con la revolución bolchevique (comunismo) y la asunción de Hitler al poder en Alemania (Nazismo). Estos dos procesos históricos afianzaron la propaganda como método de lucha política por control del poder.
Lenin líder de la revolución rusa de 1917 planteó que: la agitación y la propaganda eran los principales factores para afianzar la revolución en todas las capas del pueblo. Debido al poder de la propaganda hitleriana se consuma la anexión de Austria y Checoslovaquia a Alemania sin la necesidad de disparar una sola bala,a este proceso también se debió el «desborone» de las estructuras políticas y militares de Francia frente a Hitler, fruto de esa maquinaria de propaganda dirigida por el doctor Joseph Goebbels,quien fuese el jefe de propaganda del partido Nazi.
Desde entonces la propaganda jugó un papel determinante y ascendente en todos los procesos políticos y bélicos del mundo, pasando por la guerra fría y hasta la caída del muro de Berlín, que ha de ser la frontera histórica para el análisis de los procesos de maduración de las ideologías dominante. Es en este contexto que toman un nuevo rumbo de las luchas política y desencadena procesos sociales y económicos que transforman la forma de hacer política y por tanto de comunicar y persuadir a las masas.
Estos nuevos relatos propagandísticos, comunicacionales entran en acción con nuevas técnicas, nuevas tecnologías que implican códigos de comunicación desconocidos hasta entonces; ponen en jaque la forma de estructurar, colocar y distribuir los mensajes, dada la masificación en todos los países de los aparatos de radio, televisión, telefonía y la irrupción del internet en la última década del siglo XX, lo que impone una nueva lógica al mercadeo de la política por medio de lo que a partir de entonces se conoce como marketing político.
La llamada era de la globalización de la información, la digitalización de la propaganda y el papel que juegan hoy los medios digitales y las redes sociales, suponen un nuevo reto para quienes manejan estrategias de comunicación. Comprender la importancia de la adecuación del lenguaje, el contenido de los mensajes en la comunicación con fines políticos, tanto desde los Estados/gobiernos como los partidos y candidatos, es fundamental para lograr persuadir e impactar en las masas poblacionales que están cada vez mas expuestas a grandes cantidades de informaciones, noticias, rumores prácticamente en tiempo real y de manera bidireccional.
El papel de las redes sociales en los procesos comunicacionales y de creación de percepción es hoy día cada vez más determinante en algunos segmentos sociales. conceptos nuevos como: lo viral, trending topic (tema del momento), el meme, hashtag (etiqueta), son solo algunos de los códigos en que se enmarca la comunicación de hoy en redes sociales digitales, sin los cuales es impensable comunicarse con una gran cantidad de ciudadanos que forman comunidades y nichos que deben ser afectados por la comunicación política para que esta sea efectiva.