LUIS SCHEKER ORTIZ
Nuria Piera es asombrosa. Asombra su capacidad investigativa y la valentía de asumir los retos que le imponen su peligroso oficio, particularmente en un país donde muy pocos se atreven y honran su profesión. Donde el deber patrio se reduce al reducto de la utopía de unos cuantos imprescindibles.

Asombra su coraje y la ecuanimidad mostrada  cada vez que, como resultado de su trabajo de investigación, le salen al paso la intolerancia irracional y las consabidas amenazas que no logran acallarla. Nos asombra, si cabe más asombro,  su persistencia y su honestidad,  fiel a una vocación heredada con pasión, a la que es no es posible renunciar.

No acaba de salir de demandas y sometimientos por el reportaje de  una fastuosa mansión veraniega construida en las lomas de Jarabacoa, en un  poblado vecino donde la escuelita lugareña se cae a pedazos, lo que pone al desnudo de qué manera los funcionarios más encumbrados del gobierno de turno hacen uso indebido de los recursos del Estado y de las facilidades que  proporciona el ejercicio  de la función pública, cuando, lanza en ristre, haciéndose eco de denuncias fundamentadas, investiga y arremete contra otra modalidad  de perversión en el manejo de la cosa pública y de los fondos presupuestarios.

 Investiga, demuestra y denuncia de cara al sol, cómo el gobierno a través de múltiples instituciones del Estado, Secretaría de Estado de Agricultura, Instituto Agrario, el INDRHI, la CAASD, INAPA, entre otras, con la anuencia de la Oficina Nacional de Presupuesto, la Contraloría y la Tesorería Nacional, orquestan un mecanismo para facilitarle a los Comités de Base (CB) del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) la entrega de “unos chequecitos” de RD$3,000.00 y RD$4,000.00, que sobrepasan los RD$64 millones, como subsidio o compensación de su “trabajo político” en una campaña donde el candidato presidente aparece en 14 boletas de alianzas y se  suma, de manera grotesca, al clientelismo y al abuso de  los recursos y fondos del Estado, que vicia la limpieza y la equidad de las elecciones programadas para mayo.

 Lástima grande de un gobernante ilustrado que cosecha lauros que nos enorgullecen como país y como ciudadanos  por su brillante intervención en la reciente Cumbre Regional de Presidentes de Latino América, que en su ambición de perpetuarse en el poder no sepa distinguir la grandeza de un Estadista, de la pobreza de un mandamás.