Herrera está de emergencia, necesita la intervención del Estado para evitar que más jóvenes que ni estudian ni trabajan se introduzcan en el consumo y la venta de drogas,  se integren a las  pandillas, se maten entre sí, y para lograr que el barrio pueda tener paz  con la reducción de la violencia y la delincuencia.

 Esas preocupaciones fueron planteadas ayer por  dirigentes  comunitarios, religiosos, culturales, deportivos y  juveniles de ese sector del municipio Santo Domingo Oeste, durante un encuentro realizado en el barrio Buenos Aires.Los líderes comunitarios dijeron que como la situación es a nivel nacional, proponen al presidente Danilo Medina la creación de un programa especial de atención a la juventud desocupada (PROESA-JUDE).

Andrés Travieso, vocero de los comunitarios, dijo que la propuesta que hacen es ante las alarmantes estadísticas de jóvenes que no tienen oportunidad de trabajar ni estudiar. Se estiman en 700 mil los jóvenes con edades de 18 a 35 años  que están en esa situación. Travieso dice  que la realidad que enfrenta la juventud no es  solo en Herrera sino en todo el país. Muchos de ellos sufren de depresión.