Tanto que las compre hechas en las tiendas de decoración, como que las recicle luego de usar lo que traen dentro, las cajas son un recurso que fácilmente podemos convertir en hermosos detalles para embellecer cualquier espacio en el hogar.
Lo importante es dejar volar la imaginación, convirtiendo éstas en cajones aprovechables para guardar bisuterías, maquillajes, cepillos, peines, y por qué no, ropa interior…
En fin, de ahora en adelante no tire las cajas de regalos que le envíen, entre en la tendencia de las “Tres R”, reducir, reciclar y reutilizar, con la cual además de contribuir con el medio ambiente, puede darle a ese rincón, gavetero, meseta o donde prefiera, un estilo único, personalizado.
Y ¡ojo!, no tienen que ser de cartón, las cajas decorativas pueden ser de madera, de acero… anímese y póngalas de manera individual o dispóngalas hermosamente una sobre otra de forma vertical, o si lo prefiere, de forma horizontal.
Decore y organice. Esos lápices que tiene dispersos en su escritorio puede colocarlos de manera armoniosa en una graciosa caja decorativa.
También puede guardar flores secas, adornos que solo se usan en ciertas temporadas, zapatos…, puede colocar en ellas toallas, juguetes, libros, son aptas para una amplia gama de cosas que por lo regular se tienen en casa. ¡Guárdelas con estilo!