Con honores militares y frases de elogio sepultan juez Ibarra

Con honores militares y frases de elogio sepultan juez Ibarra

Con honras fúnebres en el Palacio de Justicia del Centro de los Héroes y la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) fueron despedidos ayer los restos del juez de la Cámara Penal de la Suprema Corte de Justicia, Julio Ibarra Ríos, fallecido a causa de un infarto el pasado domingo.

 A las 2:18 de la tarde partió el cortejo fúnebre desde la funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln hasta la UASD donde el cuerpo fue recibido por los Miembros del Consejo Universitario encabezados por el rector Mateo Aquino Febrillet.

En el salón de Museo de la UASD le fue montada guardia de honor por parte de las autoridades universitarias, debido a que Ibarra Ríos fue profesor en esa alta casa de estudios por espacio de 10 años.

Ante los sollozos de sus dolientes, fue leída la hoja de vida del fenecido magistrado,  por parte de Aquino Febrillet.

Media hora más tarde, los restos fueron trasladados a la sede principal de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) y la Procuraduría General de la República.

El presidente  de alto tribunal, Jorge Subero Isa; su primer y segundo sustitutos, Rafael Luciano Pichardo y Eglis Margarita Esmurdoc, el juez Hugo Alvarez Valencia y el procurador general Radhamés Jiménez Peña    esperaron en la entrada la llegada de los restos, al que fue el último lugar de trabajo de Ibarra Ríos.

  En ese escenario también  fueron rendidas las honras fúnebres de lugar, en su condición de juez de la SCJ y ex procurador fiscal. Ahí estuvieron presentes jueces, procuradores adjuntos, abogados y empleados tanto del Poder Judicial como del Ministerio Público.

“Honesto, probo y capaz”.  Así definió Subero Isa el ejercicio de la profesión de Ibarra Ríos, a quien, dijo, despidió el pasado viernes.

  “Me estrechó la mano y me dijo “Nos vemos el lunes” sin siquiera imaginarme como lo vería ese nefasto lunes”, expresó.

Resaltó su buen desempeño en las diferentes funciones que les tocó ejercer como profesional.

Previo a esto, en el velatorio, Jiménez Peña lo definió como un “hombre honorable que hizo un ejercicio transparente en todo el tiempo que se manejó como miembro de la SCJ”.

En términos similares también se expresaron Hipólito Mejía, Ramón Pina Acevedo, Alejandro Moscoso Segarra, Miguel Vargas Maldonado y muchos otros. La procuradora adjunta Gisela Cueto resaltó sus cualidades personales.

El sepelio

Fueron sepultados ayer a las 5:00 de la tarde con honores militares y salvas de 21 cañonazos los restos   del ex fiscal del Distrito Nacional  doctor Julio Ibarra Ríos.

El sepelio se llevó  cabo en el  cementerio Nacional de    la avenida Máximo Gómez en presencia de su esposa Nury Peón, de sus hijos Carmen Elana, Cynthia Linares, Julio Salim y Luis Eduardo y  de  amigos y allegados, entre estos el doctor Jorge Subero Isa,  presidente de la Suprema Corte de Justicia; Virgilio Bello Rosa, Anisia Rissis, Rafael Santos, Juan B. Guerrero y la ex diputada Geanilda Vásquez.

 El panegírico estuvo a cargo de hijo, Julio Salím Ibarra, quien destacó sus cualidades como  padre, esposo, profesional del derecho, amante de la libertad y el buen vivir en República Dominicana.

También hablaron el juez Hugo Alvarez Valencia, el secretario de Deporte, Felipe Payano, el ex pitcher de grandes ligas, Juan Marichal; el periodista  Raúl Pérez Reyes y el abogado Omar Valenzuela, quienes destacaron sus aportes y el trabajo que realizó en las diferentes funciones públicas que le tocó desempeñar, entre estas los cargos  de secretario de Deportes y de Educación; su participación en el Movimiento 14 de Junio y sus cualidades  como abogado y defensor de los más pobres.

“Su nombre siempre brillará por todas las cosas buenas que hizo”, expresó el doctor Omar Valenzuela, tras narrar experiencias en el quehacer profesional, que calificó como puro y pulcro.

 Mientras  el doctor Virgilio Bello Rosa, exhortó a los dominicanos a seguir el ejemplo de la familia  de Ibarra Ríos, la cual calificó de humilde, sencilla y apegado al amor a la patria.

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