En medio de una gran demostración de respeto y amor, fueron sepultados en el cementerio de la parte alta de esta ciudad (Cementerio Viejo) los restos de quien durante varios años dirigió el Cuerpo de Bomberos, Rafael Román (Felito), fallecido a los 88 años de edad.
Previo al sepelio se llevó a cabo un breve acto en el Cuerpo de Bomberos de esta ciudad, hasta donde acudieron diversas personalidades de la vida civil, así como dirigentes comunitarios y personas allegadas a Don Felito, como se le conocía en esta ciudad, en donde gozaba de gran aprecio y admiración.

En el acto hablaron el vicealcalde, Ramón Oscar Corniel Figueroa (Queco); el expresidente de la Corte de Apelación de San Francisco de Macorís, Antonio Manuel Florencio Estrella (Sombe); el intendente del Cuerpo de Bomberos de Salcedo, Rafael Guzmán, y el sacerdote Hipólito Fernández. Todos resaltaron el carácter ético y moral de Rafael Román, así como la reciedumbre que poseía y sobre todo la gran capacidad para enfrentar cualquier tipo de dificultades.

“La municipalidad de Salcedo está de luto, nosotros como vicealcalde de Salcedo, queremos llamar a la reflexión a las presentes y futuras generaciones para que tomen como ejemplo a personas de la talla y el calibre de Felito”, dijo Corniel. Mientras, Antonio Florencio destacó el historial de servicio, que comenzó siendo monaguillo cuando apenas era un adolescente, en el templo parroquial San Juan Evangelista, en donde fue el último de su especie que sirvió de edecán al sacerdote del templo, durante la visita del dictador Rafael Leónidas Trujillo en el 1960.
Felito murió a causa de un cáncer de próstata que lo mantuvo postrado en cama durante casi 4 años.