Con la crisis mundial,
si no fuera este Gobierno

Con la crisis mundial,<BR>si no fuera este Gobierno

RAMÓN NÚÑEZ RAMÍREZ
Con un choque petrolero que ha llevado el precio del barril a US$120, con una escalada en los precios internacionales de los alimentos, el mantenimiento de la estabilidad y el impacto en los precios internos, muy reducido en relación a la mayoría de las naciones, se debe fundamentalmente a una administración que se ha caracterizado por un extraordinario desempeño macro-económico y que disfruta de la absoluta confianza de los agentes económicos.

En el año 2004 el precio promedio del barril West Texas fue US$41.42 y la factura petrolera ascendió a US$1,667 millones, en el 2007 el precio promedio del barril subió a US$72.07 para una factura cercana a los US$3,267 millones, prácticamente el doble del 2004. Con precios promedios de US$120 dólares, la factura este año superaría los cinco mil millones de dólares.

La única explicación de que este choque petrolero no haya desarticulado la balanza de pagos y provocado un deslizamiento de la tasa de cambio tiene su explicación en los niveles de confianza y el ingreso récord de divisas por diferentes vías, muy especialmente inversión extranjera.

Además del petrolero, se suma el aumento de la demanda mundial, la devaluación del dólar, el uso de los biocarburantes y el refugio de los inversionistas en los “commodities” para impulsar un aumento de los precios mundiales de las materias primas y alimentos, provocando en los últimos doce meses un incremento de 90% en los precios del trigo; 60.7% el maíz y 172% el arroz, para solo citar tres; aumentos cuya magnitud no se ha transferido a los consumidores dominicanos gracias al valor agregado local de la producción agropecuaria, a los efectivos subsidios gubernamentales y los programas sociales como Solidaridad.

Frente a una oposición demagógica, prometiendo rebajas imposibles en los precios, frente a una oposición politiquera que fue incapaz de mantener la estabilidad y el crecimiento en medio de un favorable escenario internacional, se crece esta administración con un desempeño macro-económico que le permitió en tiempo récord superar la crisis provocada por el perredé y ahora conducir la nave del Estado a puerto seguro. En un panorama internacional con tantas variables negativas, poner al frente del Poder Ejecutivo a manos inexpertas, a equipos económicos que provocaron la catástrofe, a políticos sin vocación y carentes de planes sociales, es conducir la economía a una crisis peor a la pasada. Afortunadamente para bien de este país las encuestas vaticinan la derrota del retroceso.

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