El uso de la miel en la cocina, especialmente, en repostería, ha sido algo habitual desde la antigüedad, aunque en la cocina occidental se haya ido poco a poco abandonando esta práctica a medida que pasaban los siglos y ocupado su lugar por los diferentes tipos de azúcares.

Pero antes de que el azúcar hiciera su aparición, la miel era el único endulzante conocido y prácticamente estaba omnipresente en todas las recetas de dulces y productos horneados, e incluso en las de platos salados.

Actualmente, la miel se puede tomar como tal, como edulcorante, pero también es muy usada en la elaboración de postres, muchos de los cuales están hechos con miel o impregnados de ésta.

Se usa en la elaboración de productos horneados, conservas, mermeladas, jaleas, turrones, jarabes, bebidas, dulces y helados.

Ventajas de usar miel en la cocina. Es importante mencionar algunas de las ventajas que el uso de la miel ofrece desde un punto de vista gastronómico:

1. Posee un alto poder edulcorante, superior al del azúcar común. Dos cucharaditas de miel equivalen a tres cucharaditas de azúcar.

2. Es un buen conservante. Facilita la conservación de frutas, carne, frutos secos.

3. Mejora las características de los alimentos. Es un potenciador de los sabores, aporta aroma y sabor a productos como: quesos, yogures, masas horneadas, zumos de frutas, budín, caramelos y concede una coloración parda más intensa a los alimentos.

4. Ayuda a homogeneizar las salsas y suaviza la acidez de la salsa de tomate.

5. Mejora la terneza de las carnes y le da un toque especial a los asados de carne.

6. Combina muy bien con cereales, verduras y hortalizas, sobre todo con papas, arroz, zanahorias, cebolla y calabaza.

7. La miel es el único alimento que no se pudre.

Recetas

Salmón glaseado con miel

3 filetes de salmón

Sal y pimienta al gusto

4 cucharadas de harina multiuso

4 cucharadas de miel

2 cucharadas de aceite de oliva

1 cáscara de limón

5 cucharadas de mantequilla sin sal

2 dientes de ajo machacados

1 cucharada de miel

La ralladura de un limón

Preparación. Preparar la salsa de mantequilla para glasear. Derretir en una olla pequeña a fuego lento la mantequilla, revolver constantemente durante 3 minutos y luego agregarle el ajo, miel y el jugo de limón, sal y pimienta, al gusto; apagar y reservar. Luego, sazonar el salmón con sal y pimienta al gusto. Espolvorear cada filete de salmón con 1 cucharada de harina y rociarle 1 cucharada de miel. Posteriormente, calentar el aceite de oliva en una sartén grande para hornear a fuego medio alto; y cuando esté caliente, añadir el salmón a la sartén y dorar ambos lados hasta que esté dorado, aproximadamente 1-2 minutos de cada lado. Una vez sofritos, llevarlos al horno durante 10 minutos hasta que estén completamente cocidos.

Ensalada de col

5 tazas de col troceada finamente.

1/2 taza de mayonesa

2 cucharadas de vinagre

2 cucharadas de miel

1/2 cucharada de sal

1/4 cucharada de cebolla en polvo

1/4 cucharada de apio en polvo

Preparación. Mezclar la mayonesa, el vinagre, la miel, la sal y la cebolla y el apio en polvo. Verter la mezcla sobre la col troceada y remover bien. Servir frío.

Zanahorias en salsa de miel

6 zanahorias grandes

1/4 cucharada de sal

1/4 cucharada de pimienta blanca molida

1/4 de taza de mantequilla

1/4 de taza de mostaza

1/2 taza de miel

2 cucharadas de cebolletas finamente picadas.

1 cucharada de perejil finamente picado

Preparación. Lavar, pelar y cortar en rodajas las zanahorias. Cocinarlas en agua con un poco de sal hasta que estén tiernas pero no demasiado. Escurrirlas. En una sartén derretir la mantequilla y añadir la miel, la mostaza, la sal, la pimienta y las hojas de cebolleta. Cocinar todo hasta que esté tierno (entre 3 y 5 minutos). Añadir esta salsa a las zanahorias, calentar todo junto, espolvorear con el perejil y servir.