Si usted preguntara en la playa de Boca Chica cuál es la ventaja de comer conchas, específicamente almejas, la respuesta de muchos sin duda sería que su mayor virtud es su presunto poder afrodisíaco. Sin embargo, las conchas tienen un lugar bien ganado en la tradición culinaria de muchos países donde, con el suculento molusco, se crean manjares para el paladar.
Desde un sencillo cebiche hasta un elaborado arroz marinero… son un verdadero manjar.
Y en segundo lugar, pero no menos importante, son ricas en proteínas. Las almejas, por ejemplo, son bajas en calorías y grasas y ricas en proteínas. Así mismo las almejas y las chirlas (almejas pequeñas) son uno de los alimentos más ricos en hierro y vitamina B12, por lo que previenen los dos tipos de anemias más frecuentes: la ferropénica y la megaloblástica. Además aportan vitamina C, que facilita la absorción del hierro y cuida las articulaciones.
Para disfrutar de las almejas en un plato hay que saber limpiarlas muy bien, se comen crudas y vivas, hay que dejarlas unas horas en agua con sal para que suelten la arena. Se limpian quitándole todo lo marrón, raspando un poquito la concha (es como un pellejito), no sé cómo explicarlo mejor. Se enjuagan y se ponen en el plato. Se comen con limón y pimienta negra molida. No hace falta sal, son muy sabrosas y saben mucho a mar. Si están frescas huelen muy bien y cuando se les echa el limón, se mueven.
La ostra también es un placer al paladar y además una de las mejores fuentes de zinc, mineral que ayuda a mantener las defensas y necesario para la fabricación de espermatozoides, de ahí que las ostras tengan fama de alimentos afrodisíacos. También tienen vitamina D, vitamina B12, hierro, yodo y selenio. Pero el mundo de las conchas del mar es mucho más amplio. Son moluscos bivalvos que de clasifican en: almeja, chirla, berberecho, coquina, mejillón, navaja, ostra y vieira.
Cocinar con moluscos. Los bivalvos constituyen una de las piedras angulares de la gastronomía ibérica. Por ejemplo, el mejillón forma parte de todo tipo de platos típicos, y es muy apreciado como aperitivo, ya sea al vapor, en escabeche, o rebozado de queso como tentempié.
Manipulación
De las conchas
Para cocinar este tipo de producto fresco, es muy importante lavarlo bien y, cocerlo, para evitar posibles contaminaciones. No obstante, hervirlo es imposible cuando degustamos especies que son exquisitas al natural, como pueden ser las vieiras y las ostras. Los berberechos, las almejas y las navajas también adquieren un sabor excepcional cocidos o al vapor, aliñados con un poco de limón y vinagre.
Recetas
Sopa de ostras
1 cubo de caldo de pescado
18 unidades de ostras
2 huevos (solo las yemas)
1 taza de crema de leche, agua
Preparación. Primeramente, se escalfan las ostras durante tres minutos y se escurren. Se reduce el agua a la mitad y se junta con el caldo de pescado. Se deja hervir este contenido y se liga este caldo con las yemas y la crema. A continuación, se ponen las ostras. Con esta sopa conviene servir aparte unas rebanadas de pan con mantequilla. Fuente: Platodeldia.com.
Almejas a la marinera
1 libra de almejas, 2 dientes de ajo
1 guindilla, 1 taza de tomate tamizado
1 cucharadita de pimentón
1 vaso de vino blanco
Perejil, 2 cucharadas de coñac
Preparación. Se fríe la cebolla y los ajos en una paellera, junto al tomate y la guindilla durante 20 minutos. En una cazuela con el vino y un chorrito de aceite, se abren las almejas y se añade el sofrito preparado y le pone una cucharadita de pimentón dulce, perejil, el coñac, sal, y se deja cocer por 10 minutos.