POR RAPHAEL MINDER EN PARÍS
Los ministros de comercio insuflaron nueva vida ayer a las conversaciones sobre comercio mundial de la ronda de Doha al poner fin a una disputa técnica sobre las reducciones en las tarifas a los productos de la agricultura, un tema que había amenazado con echar a perder las negociaciones agrícolas de la ronda.

El avance partió de una propuesta mejorada de la Unión Europea sobre cómo calcular el valor de las tarifas agrícolas, un problema que había enfrentado a la UE con Brasil y otros países que esperan exportar más productos del agro a los países desarrollados.

Brasil y Australia estaban entre los principales exportadores agrícolas que respaldan la propuesta revisada de la UE presentada anoche. El acuerdo permite recortes de tarifas en la agricultura estableciendo una forma estándar para comparar diferentes regímenes de tarifas.

Al calificar la medida de la UE de «constructiva», Rob Portman, el nuevo representante de comercio de EEUU, dijo: «Esto es un trabajo técnico complicado, pero es absolutamente esencial. Sería difícil imaginar un avance sin tener una metodología [para calcular las tarifas]».

Sin embargo, los ministros también advirtieron que el prolongado forcejeo sobre el problema técnico de valorar las tarifas agrícolas fue un recordatorio de cuán amplias son las diferencias que siguen existiendo entre los negociadores.

Con la agricultura como fuente clave de las exportaciones de muchos países en desarrollo, el señor Portman añadió: «La agricultura es el motor que impulsa estas negociaciones y tal como lo veo, ese motor necesita arrancar».

La reunión de comercio de París se había visto como una oportunidad para traer al camino las conversaciones de la ronda de Doha y poner fin a un periodo de estancamiento que llevó la ronda «cerca de una crisis», según una advertencia reciente de Supachai Panichpakdi, el jefe de la Organización Mundial de Comercio.

Destacando el renovado optimismo, Goran Persson, el primer ministro de Suecia, expresó: «Me sorprendería mucho si no fuera posible encontrar algún tipo de compromiso sobre la agricultura».

El señor Portman dijo que este mes EEUU prepararía una nueva propuesta para la liberación de los servicios, pero los países en desarrollo siguieron preocupados sobre la apertura de sectores como el turismo y las telecomunicaciones sin recibir a cambio un acceso mejorado a los mercados laborales para sus trabajadores calificados.

Peter Mandelson, el comisario de comercio de la UE, pidió a todas las partes que muestren «un alto nivel de ambición» y no diluyan el valor de la ronda colocando sus ofertas de apertura del mercado «en el común denominador más bajo». Dijo: «No hay espacio para la complacencia y queda mucho trabajo por realizar. Todo el mundo tiene que enseñar sus cartas un poquito más».

La reunión de esta semana en París fue también una oportunidad para que los ministros se reunieran bilateralmente, o en grupos más reducidos y abordar temas específicos., como la preocupación en Europa y EEUU sobre el auge de las exportaciones textiles de China.

VERSION AL ESPAÑOL DE IVAN PEREZ CARRION