POR MARÍA MERCEDES
Por los significativos aportes que Miguel Amado hizo en el país como embajador-jefe de la Delegación de la Comisión Europea desde el año 2000 hasta agosto de 2004, período en el que logró el fortalecimiento de las relaciones bilaterales entre República Dominicana y la Unión Europea, el Gobierno dominicano a través de la Secretaría de Estado de Relaciones Exteriores (Serex), lo condecoró con la orden al Mérito de Duarte, Sánchez y Mella en el Grado de Gran Cruz de Plata.

En el acto realizado en la sede de la Cancillería, la imposición de las medallas estuvo a cargo del vicecanciller José Manuel Trullol, en representación del canciller Carlos Morales Troncoso, quien ponderó el trabajo que durante los últimos cuatro años desempeñó el diplomático en el país.

«Esta condecoración la conferimos con la plena seguridad de que él la merece por su contribución a nuestro desarrollo económico y social, mediante el apoyo a los programas y proyectos de cooperación técnica y financiera que desde hace más de una década ejecuta la Unión Europea en el país», expresó.

Miguel Amado, visiblemente emocionado agradeció al presidente Leonel Fernández por tan importante distinción de los más altos honores que concede el Estado, y de manera muy especial al pueblo dominicano por la gran experiencia que significó para él trabajar aquí.

También se refirió a la fuerza del pueblo dominicano, su calidez y nobleza. «El alma de ustedes es muy grande y todo vale la pena».

Concluidas sus palabras, los presentes le dispensaron un fuerte aplauso y continuaron disfrutando del coctel.