POR ODALIS MEJIA
El representante de la Shell en el país y vicepresidente de la Refinería de Petróleo (REFIDOMSA), Rafael Maradiaga, abogó porque el proceso de revisión del acuerdo de sociedad entre el Estado dominicano y esa compañía, se haga de una forma estructurada, clara, sensata y no sobre la base de especulaciones y emociones.

 «Ese proceso de revisión tiene que ser de una forma estructurada, clara y no creo que cosas que han sido exitosas se deban cambiar únicamente porque queremos cambiar», expresó.

Añadió que la Shell está dispuesta a analizar las propuestas, tras exhortar a las autoridades a que consideren los 36 años de éxito con respeto, por entender que «no se deben tomar decisiones de forma emocionales, sino de forma consciente y sensata».

Maradiaga expresó que de forma especulativa han sido acusados de situaciones equívocas que no han sido probadas, lo que estimó que no es justo.

Mostró su preocupación porque desde el inicio de esta gestión, dijo que ha habido demandas amparadas en querer fiscalizar y controlar las operaciones de la Shell.

Destacó la trayectoria de trabajo de ese consorcio internacional, la que dijo tiene una presencia en el país de más de 75 años, de los cuales 36 han sido asociados al Estado, generando utilidades y dividendos para sus socios, pagando impuestos y cumpliendo con todas las regulaciones establecidas en el país.

Apuntó, además, que han sido transparentes y que eso se ha probado en diferentes  auditorías hechas por la Dirección General de Impuestos Internos, la Cámara de Cuentas y empresas internacionales.

El representante de la Shell dijo que los accionistas han mostrado preocupación por lo que públicamente se ha dicho sobre revisión del convenio de sociedad con el Estado, por lo que visitará al país próximamente el encargado de esa empresa para América Latina, para sostener un encuentro con el presidente Leonel Fernández.

Recordó que las intenciones de revisar el acuerdo datan desde el 1996, cuando mediante decreto se creó una comisión en tal sentido integrada  por los ministros de Finanzas, de Industria y Comercio, Secretariado de la Presidencia y el presidente de REFIDOMSA.

No obstante, añadió que por algunas razones eso no se continuó, pero que el pasado año se activó de nuevo con el propósito  de «super vigilar y controlar las operaciones de la compañía».

«Entramos en una discusión de que cómo era posible que una empresa con el récord de la Shell debería revisarse con el argumento de super vigilar y controlar», apuntó.

Dijo que solicitó que se indicara cuáles aspectos específicos del convenio querían revisar, lo cual está en proceso de análisis con los abogados de la Shell, «ya que no tienen claridad en lo que respecta a qué queremos hacer con cambiar 30 artículos».

Confió en que en el proceso de revisión primará el respeto de la seguridad jurídica, tras solicitar que se maneje de una forma ordenada y sensata,  «no estamos de acuerdo en que este proceso se dé de una forma acusativa o especulativa».

Dijo que no entiende la posición de la presidencia de REFIDOMSA, porque las veces que ha hablado con el presidente Fernández y varios ministros del gobierno, ha encontrado una posición positiva.

«Creo que este gobierno está tratando las cosas de manera correcta, por lo que sorprende las diferencias con la presidencia de REFIDOMSA, las cuales vamos a aclarar, tras enfatizar que sus números «están claros y los libros están abiertos».

Dijo que el grupo Shell está analizando los pedidos de revisión con los abogados de los accionistas y  que cuando tengan una posición definida,  iniciarán las discusiones.

Destacó el liderazgo empresarial de la Shell, de la cual añadió que sólo el pasado año invirtió cerca de US$3.0 millones en el negocio de distribución.

Recordó que la REFIDOMSA es un negocio de los más importantes en el país, por la magnitud de sus operaciones y también por la estrategia que representa.