Condimentos sazonados en las aspiraciones electorales

Condimentos sazonados en las aspiraciones electorales

Cuando el presidente Medina, en su poco acostumbrada rueda de prensa aniversario del pasado martes 19, dejó abierta una posibilidad de buscar una repostulación ante la insistencia de sus seguidores, abriendo un abanico de amplias posibilidades que le impartirá sabor a la desesperación de los potenciales aspirantes de su partido a la cacería de la candidatura, que muchos de ellos, ya creían tener segura.

No hay que ser un experto electoral para asumir que el candidato que lleve el PLD a la Presidencia en el 2016, obtendrá el triunfo. De ahí el entusiasmo de los aspirantes que desafían a quien fuera su innegable carta de triunfo en los eventos de otrora, pero que todavía arrastra los efectos de una mala administración con un déficit superior a los 200 mil millones de pesos y una cola de corrupción de amplio espectro y repudio.

Por lo tanto, el presidente Medina le ha colocado una pasta de jabón al sancocho electoral del 2016, y aun cuando no llegue a las vías de hecho, al menos siembra una preocupación en aquellos que creían su competidor iba a ser el presidente Fernández, a quien consideraban vulnerable y más fácil de vencer sin la presencia del presidente Medina. Éste lo ha modificado ante la eventualidad de su postulación, que al tenor del nivel de popularidad que posee, lo convertiría en una candidatura imbatible y sería la forma más segura de que el PLD continúe con su plan de gobernar hasta el 2044.

Es innegable que los peledeístas, ante el éxito alcanzado por el presidente Medina en los primeros dos años de su gestión, con niveles de popularidad por encima del 80% tan excelente, no van a dudar ni un momento en garantizar esa continuidad, que solo se la aseguraría el actual presidente que ha visto elevarse su popularidad con las perspectivas de que acaricia la idea de su repostulación.

Para el presidente Medina, reagrupar sus fuerzas a la hora que decida por una nueva carrera presidencial, cosa que no le gusta a sus hijas, le sería muy fácil recoger las aspiraciones de sus compañeros que sabrá Dios de dónde están sacando recursos para venderse en costosas precampañas de quienes hasta ahora exhiben una independencia de criterio muy notable en contra de la costumbre de logia cerrada que eran los comités de trabajo del PLD en su más pura doctrina partidaria de estricto cumplimiento de los postulados de obediencia ciega a las directrices del partido en la venta de sus opciones como candidatos.

El panorama peledeísta, después de la rueda de prensa presidencial del martes 19, se modificará y hasta el presidente Fernández, que es un fino estratega, estaría poniendo más cuidado para ver cómo es la nueva dirección del rugido de los vientos, que él creyó en un momento dado no tumbaban cocos y ahora podía significar un viento con fuerza de galerna y peligrosa intensidad que llevaría adecuar nuevas estrategias. Se buscarían las mejores opciones para las candidaturas legislativas y municipales, de forma que la cuota de poder se consolide y asegure que las instituciones públicas funcionen adecuadamente, sin el temor de un desorden e incapacidad de las fuerzas de la oposición, sedientas de poder y arrasar con instituciones que ahora mismo se desempeñan de buena manera sin los temores del desorden que se produciría si cayera en manos de las fuerzas de la oposición, que para el 2016 tendrían doce años sin ofrecerle una pequeña cuota del poder a su militancia.

Parece ser que el presidente Medina le ha puesto el oído en el corazón de su pueblo y el resultado de esas visitas sorpresas son las consecuencias de que, aun cuando hay un impedimento constitucional que prohibe la reelección, habría que buscarle un bajadero aceptable a la Constitución que le dé tranquilidad a la ciudadanía, que ha logrado, en lo que va del período de Medina, para que se consoliden tantas hazañas positivas que como nunca antes se había pensado que una administración pudiera haber protagonizado en tan poco tiempo.

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