El presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), Pedro Brache, se desvinculó de grupos empresariales que supuestamente presionan al gobierno para que empiece a abrir paulatinamente las empresas de ciertos grupos económicos.
Brache dijo desconocer quiénes ejercen esa presión, y precisó que, de su parte, desea que se reabra la economía cuando existan las condiciones.
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El empresario tampoco se identificó con los pronósticos sombríos sobre el futuro de la economía dominicana ante el impacto del COVID-19. Aseguró sentirse optimista y confiado en que el país logrará superar esta crisis.
El presidente del CONEP no tiene ninguna idea sobre la cuantía de las pérdidas económicas a causa de la pandemia; afirmó que debido a su preocupación por atender la crisis sanitaria, el CONEP no ha hecho esos cálculos.
Pedro Brache ofreció declaraciones a su salida de una reunión con la Junta Central Electoral (JCE), donde discutieron el protocolo de salud para las elecciones del 5 de julio, y el voto en el exterior. Explicó que ambas entidades seguirán un calendario de trabajo que agotarán en futuras reuniones.