Hoy 
POR ROSA ALCÁNTARA
El presidente electo Leonel Fernández consideró ayer que es sumamente alarmante y preocupante el deterioro progresivo que está afectando a la economía, la sociedad y los servicios sociales. Al término de una reunión de casi tres horas con la Conferencia del Episcopado Dominicano, Fernández dijo que tiene la convicción de que el próximo gobierno con capacidad de trabajo y la laboriosidad del pueblo sacarán al país de la crisis.
Fernández, presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), expresó que el encuentro con los obispos fue para intercambiar opiniones e impresiones acerca de la situación económica, social, político e institucional.
La gravedad del país «es inocultable, dijo. Es la primera plana de todos los diarios de hoy (ayer) el nivel de deterioro progresivo que está afectando a la economía y a la sociedad dominicana y a los servicios sociales. Entendiendo esa gravedad, entendemos que hay soluciones».
Aseguró que su administración mantendrá una relación de comunicación permanente con la Conferencia del Episcopado, a través del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez para informarlos de las situaciones y de cómo la Iglesia puede colaborar para aliviar la situación de calamidad en que está la Nación.
Consideró que ese intercambio contribuye a mejorar su visión del país y de lo que debe hacer.
Expresó que está profundamente preocupado, como todos los dominicanos lo están, por el nivel de deterioro que hay en la República Dominicana.
Para el país salir de la crisis, dijo Fernández, aunque hay una profunda crisis «eso no significa que la República Dominicana va a sucumbir».
En otros momentos, dijo, el país ha tenido crisis muy severas y la Nación siempre ha salido hacia adelante.
Fernández llegó a la Casa San Pablo a las 10:00 de la mañana de ayer. Allí lo recibieron el cardenal López Rodríguez, monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, presidente de la Conferencia del Episcopado, y monseñor Agripino Núñez Collado, rector de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM).
Monseñor De la Rosa y Carpio dijo que se trataba de una visita de cortesía del presidente electo a los obispos.
En la reunión a puertas cerradas participaron también monseñor Francisco José Arnáiz, obispo emérito de la arquidiócesis de Santo Domingo; monseñor Jesús María de Jesús Moya, obispo de San Francisco de Macorís; monseñor Francisco Ozoria, de la diócesis de San Pedro de Macorís, y monseñor Freddy Bretón, de la de Baní.
Igualmente, monseñor José Dolores Grullón Estrella, de la diócesis de San Juan de la Maguana; monseñor Diómedes Espinal, obispo auxiliar de Santiago; monseñor Gerónimo Tomás Abreu Herrera, obispo de la diócesis de Mao-Montecristi; monseñor Nicanor Peña, obispo de Puerto Plata; monseñor Antonio Camilo, de La Vega; monseñor Pablo Cedano, auxiliar de la arquidiócesis de Santo Domingo, y monseñor Ramón Benito Ángeles, secretario general de la Conferencia del Episcopado Dominicano.
