WASHINGTON.  Agencias.  El Congreso aprobó ayer  una ley para restablecer los beneficios a los trabajadores que estuvieron desempleados seis meses o más, poniendo fin a una interrupción de siete semanas que hizo que dos millones y medio de personas perdieran dichos beneficios de un promedio de 300 dólares semanales.

La votación de 272-152 en la Cámara de Representantes enviará la medida al presidente Barack Obama, quien prometió firmarla rápidamente.

La votación en la cámara baja se produce menos de 24 horas después que el Senado votó el miércoles la medida, uno de varios puntos en la agenda demócrata para promover empleos que en su mayor parte se ha visto obstaculizada por semanas de batallas con los republicanos.

El vocero de la Casa Blanca Robert Gibbs dijo  que Obama firmará la medida en cuanto la reciba.

Los pagos retroactivos podrían concretarse la semana próxima en algunos estados, mientras que en otros podría tardar algunas semanas para recibir sus beneficios. La ley suministra ayuda a cinco millones de trabajadores desempleados. Aproximadamente la mitad dejó de recibirlos desde que la financiación de los beneficios expiró el 2 de junio. «Los estadounidenses que trabajan día y noche para volver a levantarse y apoyar a sus familias en estos momentos económicos difíciles merecen más que obstrucciones y juegos partidistas», dijo Obama.