A propósito de la petición del papa Francisco, conozca qué es la gestación subrogada

A propósito de la petición del papa Francisco, conozca qué es la gestación subrogada

El papa Francisco pidió el lunes una prohibición universal a la “deplorable” práctica de la gestación subrogada, e incluyó la “comercialización” del embarazo en un discurso anual que enumera las amenazas para la paz global y la dignidad humana.

En un discurso sobre política exterior a los embajadores acreditados ante la Santa Sede, Francisco lamentó que 2024 haya comenzado en un momento histórico en el que la paz se ve “más amenazada, debilitada y en parte perdida”.

¿Qué es la «maternidad subrogada»?

«Subrogación» o «sustitución» es cuando una mujer queda embarazada con la intención de entregarle el bebé a otra persona luego del parto. Generalmente, ella tiene el bebé de una pareja de padres que no puede concebir por sí sola.

Hay dos formas de maternidad subrogada.

La tradicional, que es cuando la madre es inseminada artificialmente, usando su propio óvulo. Esto la vuelve también la madre biológica.

La gestacional, la que ocurre cuando el óvulo es proveído por la pareja que se quedará con el bebé. Es decir, el óvulo es fertilizado In Vitro (IVF) e implantado en la madre sustituta. En este caso, la madre sustituta no tiene contacto genético con el bebé.

La legalidad de la maternidad subrogada depende del país.

En Francia, Alemania, Italia, España, Portugal y Bulgaria la ley prohíbe todas sus formas.

En otros como Reino Unido, Irlanda, Dinamarca y Bélgica, se permite mientras la madre sustituta no sea remunerada. Sólo puede recibir dinero para «gastos razonables». Pagarle a la madre una tarifa (lo que se conoce como subrogación comercial) está prohibido.

En América Latina, el estado mexicano de Tabasco menciona la maternidad subrogada en su Código Civil. El artículo 92 establece que «en el caso de los hijos nacidos como resultado de la participación de una madre gestante sustituta, se presumirá la maternidad de la madre contratante que la presenta, ya que este hecho implica su aceptación».

Elton John  con su pareja, David Furnish
Elton John con su pareja, David Furnish, quienes fueron padres a través de una madre sustituta.

La subrogación comercial es ilegal en algunos estados de EE.UU. y otros países como India, Rusia y Ucrania.

La gente que quiere lograr la paternidad de esta manera, debe ir a otros países.

Pero incluso dentro de un país la ley cambia. Por ejemplo, Australia, país de donde son los padres biológicos de Gammy, tiene algunos estados donde incluso es delito ir a otros países a «comprar» una madre sustituta.

¿A qué lugares va la gente buscándola?

Los expertos señalan que hay países populares para padres que buscan maternidad subrogada, como Estados Unidos, India, Tailandia, Ucrania y Rusia.

México, Nepal, Polonia y Georgia son países descritos como posibilidades para acuerdos de maternidad subrogante.

Los costos varían significativamente de país en país y también dependen del número de ciclos de IVF necesarios y los seguros de salud.

Families Through Surrogacy, una organización internacional sin fines de lucro, hizo una estimación de los costos asociados en distintos países.

  • EE.UU. – US$100.000
  • India – US$47.350
  • Tailandia – US$52.000
  • Ucrania – $49.950
  • Georgia – $49.950
  • México – $45.000

Hay pocas estadísticas sobre cuántos niños nacen a través de vientres de alquiler, ya que muchos países no tienen un registro formal sobre el tema.

Nicola Scott, abogada de la firma británica Natalie Gamble Associates, dice que alrededor del 25% de sus clientes en el tema van a EE.UU., ya que se sienten más seguros.

«Estados Unidos tiene una larga historia de subrogación. Una de las razones es que los padres saben que hay un marco establecido en muchos estados, particularmente California, entonces, les da seguridad ir allá», dice.

«La gente que elige otros destinos tiende a hacerlo porque la subrogación en ellos tiene un costo mucho menor que en EE.UU.».

En muchos países, «la subrogación no es ilegal, pero no hay un marco legal que lo sustente», asegura Scott.

Es el caso de la mayoría de los países latinoamericanos, aunque hay algunos, como Argentina y México, que tienen iniciativas actualmente en el congreso que buscan darle un marco legal a la maternidad subrogada.

En Tailandia, de donde es la madre sustituta de Gammy, no hay una regulación clara sobre el tema. Sin embargo, hubo un proyecto de ley sobre subrogación, y hoy las autoridades dicen que debe haber un nexo sanguíneo entre la madre sustituta y los padres.

India también está considerando legislar sobre el tema, regulación que podría «restringir de manera importante la subrogación», explica Scott, «cerrándoles la puerta a solteros y parejas homosexuales».

¿Cuáles son las complicaciones?

Gammy
Gammy con su madres sustituta, Pattaramon Chanbua, quien se está haciendo cargo del bebé con síndrome de Down.

No hay una ley internacional que trate el tema, por lo que, ante problemas derivados de un pacto de subrogación, muchos padres quedan vulnerables, o incluso, sin patria.

Puede tomarle muchos meses a los padres traer a casa un bebé dado a luz por una madre sustituta, dado que no necesariamente serán reconocidos como sus padres legales de manera automática.

«En Tailandia, las sustitutas son vistas como las madres legales, así que si los padres la dejan con el bebé, ella es la responsable legal. Esta es una de las dificultades ha puesto en evidencia el caso de Gammy», dice Scott.

«En India los padres futuros son vistos como los padres legales, mientras en la ley británica, por ejemplo, es la madre sustituta la que es reconocida por la ley.

«Esto significa que un bebé nacido por subrogación en India, con padres británicos, nace sin patria, y debe postular a la ciudadanía británica».

Dependiendo del estatus legal de los padres en su país de origen, el tema también puede volverse un dolor de cabeza para los que decidan separarse, explica Paul Beaumont, profesor de Derecho de la UE y Derecho Internacional Privado de la Universidad de Aberdeen, autor del libro «Acuerdos Internacionales de Subrogación».

«Puede haber una ventaja injusta para la disputa por la custodia. El padre generalmente tendrá más derechos, como el que aportó el esperma. Y como, bastante seguido, el óvulo es aportado por un tercero (…) la madre puede no ser reconocida como uno de los padres del niño», explica Beaumont.

Muchos expertos argumentan que un acuerdo internacional similar a la Convención de Adopción de La Haya es necesario para que las reglas sean consistentes más allá del país.

Sin embargo, esto es difícil, ya que cada país tiene una visión distinta de la subrogación.

¿Hay riesgos para las madres sustitutas?

Embarazada
Como cualquier industria lucrativa, la subrogación puede abrir la puerta a situaciones de abuso, dicen los expertos.

Beaumont argumenta que la ley también necesita asegurar que las «clínicas están debidamente reglamentadas y las madres son compensadas adecuadamente, recibiendo el cuidado clínico apropiado y dando el consentimiento adecuado».

La regulación podría también asegurar que «los padres futuros son considerados aptos para la paternidad en su país de origen», agrega.

Sin una regulación, el riesgo potencial para cualquier madre sustituta es que «si el niño nace con algún tipo de defecto, los padres futuros podrían abandonarlo», como fue el caso de Gammy, con síndrome de Down.

A pesar de que es difícil recolectar evidencia de explotación, es posible que, como cualquier potencial industria lucrativa, la subrogación puede abrir la puerta a situaciones de abuso, con mujeres forzadas por terceros a ser madres sustitutas, dice Beaumont.

(Con información de la BBC Mundo e Infobae).

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