La finalidad del laboratorio clínico es ofrecer resultados que apoyen al médico en la prevención, el diagnóstico y el o los tratamiento(s) oportuno(s) de enfermedades. Para poder responder adecuadamente es necesario que todas las fases de asistencia se realicen, teniendo en cuenta la existencia de diversas variables propias de cada paciente que influyen de manera significativa en la calidad final del resultado.

Estas variables se conocen como condiciones preanalíticas. La edad, el género, la raza y el embarazo son condiciones que no se pueden modificar, por lo que el médico debe conocerlos para poder interpretar adecuadamente los resultados; sin embargo existen otras variables modificables con la correcta preparación del paciente y constituyen los primeros pasos para obtener resultados válidos.

Antes de la realización de las pruebas, de forma ideal el paciente debe ponerse en contacto con el laboratorio clínico, donde recibirá información adicional y detallada sobre las condiciones previas necesarias para realizarse la toma de muestra.

De manera general, el día previo a la realización de las pruebas de laboratorio se debe evitar:

• Cualquier actividad física intensa (trabajo pesado, deportes, danza, y actividades similares).

• Cambios en la dieta habitual (con excepción de pruebas que requieren una dieta en particular).

• Ingerir cualquier bebida alcohólica.

• Fumar.

• Situaciones estresantes, por lo que se recomienda dormir a su hora habitual y planificar bien todo para que ese día no esté ansioso (de 6 a 8 horas de sueño).