Economistas de tres sectores diferentes consideraron correcto que el Gobierno, aunque un poco tarde, se proponga lograr un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, actitud que proviene de la urgencia por obtener rápidos desembolsos con el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo. Opinaron por separado  Arturo Martínez Moya, Porfirio García y Guillermo Caram.

Tres economistas coincidieron ayer en afirmar que el Gobierno hace lo correcto, aunque un poco tarde, al tratar de negociar un nuevo acuerdo con el  Fondo Monetario Internacional por US$200 millones y agilizar el desembolso de US$700 millones  por parte de los bancos Mundial e Interamericano de Desarrollo para compensar la reducción de los ingresos.

Arturo Martínez Moya, presidente de la Comisión Económica del Partido Revolucionario Dominicano(PDR); Porfirio García, ex rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo y Guillermo Caram, ex gobernador del Banco  Central, dijeron que esa decisión es mejor que emitir bonos soberanos por US$1000 millones.

Martínez Moya. Dijo que el Gobierno está muy endeudado con la banca local  y tiene retrasos con los suplidores y contratistas de obras y productores porque con esos sectores es que ha financiado el déficit durante los primeros seis meses de este año.

Sostuvo que no se quería firmar con el Fondo Monetario por razones políticas, que ahora han tirado la toalla y procuran por todos los mediosllegar a un entendimiento y obtener esos recursos, pero que aunque es un poco tarde no tienen otra vía que hacerlo.

Recordó que en octubre del pasado año la Comisión Política del PRD  había planteado la necesidad de llegar a un acuerdo con el FMI para minimizar los efectos de la crisis internacional este año, pero  que no se hizo caso.

“No lo hizo y ahora lo está haciendo ocho meses después un poco tarde, sin embargo, nosotros lo apoyamos porque no hay otra vía, nunca existió otra alternativa. Parece ser que el Gobierno olvidó la alternativa de los bonos soberanos porque con esta decisión hecha para un lado la política de emitir mil millones de bonos para venderlos en el mercado de valores”.

Porfirio García

Para el ex decano de la Facultad de Economía de la UASD y ex rector de esa casa de estudios, Porfirio García, la única manera que tiene el Gobierno de paliar la situación económica ante la caída de los ingresos es mediante un acuerdo con el Fondo, como lo ha propuesto en varias ocasiones.

Dijo que era difícil que se pudiera obtener buena aceptación por medio de la emisión de bonos soberanos por la situación económica mundial, además de las altas tasas que generan, por lo que entiende  se  hace lo mejor.

Señaló que el Gobierno está obligado a reorientar el gasto para enfrentar la desaceleración del crecimiento económico  fruto de la caída de las recaudaciones fiscales.

“El Gobierno debió buscar esos recursos frescos con del Fondo Monetario Internacional hace tiempo como lo hicieron los países centroamericanos, no obstante yo aplaudo la decisión de las autoridades gubernamentales para que se dialogue con el FMI”.

Guillermo Caram

En cambio Guillermo Caram, ex gobernador del Banco Central,  dijo que el anuncio de que el Gobierno gestionará el desembolso de US$700 millones y la aprobación de un préstamo rápido por US$200 millones  con el FMI, es un buen  indicador de que las autoridades están entrando en razón sobre la realidad económica del país.

“Ante el déficit existente yo creo que es lo mejor recurrir al Fondo porque al fin y al cabo con el Fondo Monetario tenemos un acuerdo de vigilancia dirigido por ellos mismos y además el Fondo de hoy no es el cuco de otros años, ellos se han dado cuenta de que sus recetas a veces apretaban mucho la tuerca”, dijo.   Consideró que esas entidades  tienen recursos frescos que aportan los países  desarrollados mediante  el Grupo G-20.

Zoom

El déficit

Para Arturo Martínez Moya la caída de  los ingresos  es de  RD$16,000 millones  este año.

Sensatez

Guillermo Caram cree sensato la firma de un nuevo acuerdo con el FMI.

No empeñar el país

Porfirio García entiende que hay que pagar parte de capital y los intereses de los préstamos para no empeñar el país.