Consideran reforma fiscal debe consolidar las finanzas públicas

Consideran reforma fiscal debe consolidar las finanzas públicas

El compromiso del gobierno en transparentar y disminuir el gasto corriente es un factor vital en la reforma fiscal integral, se planteó esta semana en un seminario organizado por la Cámara Americana de Comercio, con la asistencia de representantes del sector público y privado.

En la actividad, Manuel Diez Cabral, presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios (ANJE); Edgar Barnichta, abogado y experto tributario; Gregorio Abreu, de la Dirección de Impuestos Internos, así como David Fernández y Magín Díaz, coincidieron en que la reforma debe consolidar las finanzas públicas y aumentar la eficiencia en las recaudaciones.

Diez Cabral planteó que la reforma fiscal debe ser el resultado del consenso entre todos los sectores y abogó por la universalización de los impuestos, porque se castigue a los evasores y para que se baje el Impuesto Sobre la Renta a las empresas, para fomentar el pago.

Se prevé que para julio de este año, la reforma tributaria debe someterse al Congreso Nacional y que la misma responda a los cambios que generarán en los ingresos públicos, los Tratados de Libre Comercio (TLCs) con Estados Unidos y otros bloques regionales, a exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI) y garantizar la sostenibilidad de la economía ante la crisis provocada por el problema bancario.

La reforma debe generar más eficiencia en las recaudaciones y aumentar los ingresos, sin afectar la competitividad de las empresas, dijo Diez Cabral.

La reforma, no sólo debe satisfacer la urgente necesidad de ingresos, sino el crecimiento sostenido de la economía, se planteó en el seminario.

Se estima que la reforma fiscal podría elevar la presión fiscal que actualmente ronda el 16 por ciento, a más de un 18 por ciento.

De acuerdo a David Fernández, es necesario que la reforma fiscal se haga basada en el consenso y respetando los intereses de los dominicanos.

De su lado, Magín Díaz, subsecretario de Finanzas, confió que el gobierno se propone una reforma fiscal técnicamente viable y descartó que se vaya a actuar precipitadamente.

«La reforma debe estar orientada a eliminar gradualmente los impuestos que son distorsionantes», dijo.

Entre los impuestos que deben eliminarse están el recargo de 2.0 por ciento a las importaciones y el 1.5% a las ventas brutas, porque frenan la competitividad de los sectores productivos y afectan el libre comercio.

Por su lado, Barnichta dijo que es esencial que el Estado se maneje dentro de una estricta disciplina fiscal, que obtenga del sector privado los recursos necesarios para operar con un gasto corriente adecuado, sin dispendio de sus recursos.

«Una sana política fiscal, monetaria y cambiaria, resulta imprescindible para que los sectores público y privado puedan desarrollar sus actividades», dijo.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas