La Asociación Dominicana de Contratistas de Obras Estatales (Adocoe) atribuyó ayer al diseño deficiente el colapso de  varios puentes   durante las últimas temporadas ciclónicas.

También lo atribuye a  la  falta de seguimiento al proceso    de construcción por parte del Ministerio de Obras Públicas. El ingeniero Miguel Liberato, presidente de la entidad, explicó que  en el diseño de los puentes localizados en la parte baja de una cuenca hidrográfica es obligatoria la protección del talud de los aproches, así como la construcción de obras de regulación de cauce aguas arriba.

El último puente que colapsó como consecuencia de  la tormenta “Isaac” fue el conocido como Los Pilones, que comunica a Baní con   Azua, tras el  desborde del río Ocoa que derribó los aproches de la ladera este de la vía.

El viaducto, conocido como “El Puente de Acero”, localizado en las inmediaciones del kilómetro 35  del tramo Baní –Azua de la carretera Sánchez, contiguo a las comunidades de Las Carreras y El Cruce de Ocoa, perdió aproximadamente ocho metros entre sus aproches y parte de la vía, debido a la velocidad y el gran volumen de las aguas del río Ocoa.

Exculpa a ingenieros.  Liberato, “master of science” con una especialidad en puentes y túneles, exculpó de responsabilidad a los ingenieros constructores de esas obras.

“Los responsables de esa situación son las  autoridades que ha tenido en el pasado el Ministerio de Obras Públicas, ya que la situación es repetitiva en cada temporada ciclónica y los técnicos del Gobierno no le han buscado soluciones definitivas”, dijo el ingeniero Liberato.