Hoy 
Sicóloga, Terapeuta familiar
Pregunta de la lectora: Mi esposo fue infiel después de 23 años de casada. Esta crisis me da la sensación que he hecho demasiado. Reconozco que la inversión que hacemos no supera lo que los maridos nos puedan dar. Antes quería dar lo mejor de mí buscando un buen matrimonio y buen marido. Ahora me doy cuenta que no es así. Es una lección de vida. Nunca es tarde para aprender a vivir y sacar lo mejor de una. Ya hice para el matrimonio todo cuanto pude, ahora seré mejor para mí.
Respuesta de la terapeuta: Noto que esta experiencia la ha motivado a reflexionar sobre usted misma. Ha elegido un camino que la lleva a crecer y madurar. Ve esta crisis como una oportunidad para trascender el dolor. No detenerse solamente a sufrir y hurgar en por qué él le fue infiel, si no, el desafío que le plantea la experiencia.
No se cuestione por lo que invirtió en la relación, pues lo hizo creyendo en ella, en su pareja y sus hijos. Reconocer todo cuanto dio a su familia en cuidado, amor, entrega, lealtad, fidelidad y tiempo les sirve para saber que usted no es culpable de la infidelidad de su pareja.
Las mujeres, por su estructura biológica y la presencia de las hormonas estrógeno y oxitocina, están preparadas para las relaciones y las conexiones emocionales. Por eso, usted invirtió con empeño en la relación de pareja e hijos. Su formación familiar, su sistema de creencias inciden en la valoración de su inversión.
La valoración no es tan solo subjetiva, es decir lo que usted cree invirtió, si no, objetiva, a partir de lo que verdaderamente hizo. Habrá valorado su inversión en el cuidado de las tareas del hogar, limpieza, orden, ahorros económicos, estar pendiente a los alimentos de su pareja e hijos. Llevar los hijos a la escuela, estar dispuesta para su pareja, entre otros asuntos.
Su apreciación actual descansa en cuestionar que su pareja nunca valoró estos aportes como meritorios y retribuirle con fidelidad y lealtad. En consecuencia, considera que de nada valió y por eso piensa centrarse más en usted.
Pienso que destacar sus talentos, redescubrirse y replantearse la vida es un gran aporte a usted y a la familia. Puede elegir vivir en la sombra de la infidelidad o en la claridad hacia el futuro.
