Sicóloga, Terapeuta familiar
Pregunta del lector: Soy un joven de 20 años. Aún soy virgen. No sé si debería sentirme inferior o si sentirme feliz. A mi alrededor hay gente que ha experimentado sexo. Esto me hace sentir como un punto y aparte. He hablado con dos amigas, quienes me dicen que les gustan los hombres con experiencia. Otra me dijo que le da igual. Me siento preocupado por el hecho de ser rechazado por ser virgen. ¿Qué me aconsejaría en cuanto a mi condición?
Respuesta de la terapeuta: Usted no es la única persona que experimenta esta situación. Muchos adultos jóvenes no han decidido iniciar la actividad sexual de forma activa. Cada quien decide iniciar su experiencia sexual de acuerdo a su historia de vida, creencias y experiencias sexuales.
Sentirse juzgado y presionado por los demás puede generar problemas de orden psíquico, porque actuará por ellos y no por convicción propia.
Cada persona tiene su tema sensible que la hace vulnerable a circunstancias.
La sexualidad en los individuos ha tenido históricamente sus complejidades, aciertos y desaciertos. La vida sexual siempre estará matizada por la época, períodos influenciados por la ideología puritana y de liberación sexual, etapas de represión y de libertad sexual.
En tiempos actuales, la sexualidad no está centrada en relaciones con vínculos afectivos. Nos encontramos frente a una apertura hacia el vacío. Lo que importa es la satisfacción del deseo, sin tomar en cuenta las implicaciones psíquicas.
La carencia de significado en las relaciones pone en riesgo la integridad psicológica a consecuencia de la aparición de confusiones respecto así mismo y su valor sexual.
Tenemos matizaciones en la vida sexual que van desde las aspiraciones de libertad sexual femenina, hipersexualismo, homosexualismo, bisexualiamismo, entre otras.
Nos dice la psiquiatra Marie-France Hirigoyen que vivimos en una sociedad onanista, era de perpetua provocación erótica caracterizada por la caída de las prohibiciones, bajo el pretexto de la conquista del placer, han aparecido nuevas formas relativas al rendimiento sexual.
Le sugiero busque la respuesta en usted mismo. Las influencias externas de amistades pueden generarle más confusión.
Es preferible buscar la orientación de un profesional de la conducta con quien usted pueda discutir su preocupación. Los amigos opinarán desde su realidad y experiencia, no desde la suya.