CONSULTORIO DE FAMILIA

CONSULTORIO DE FAMILIA

Pregunta del lector: Mi hija de 4 años desde que despierta pide su Ipod y se pone a jugar. En diferentes momentos del día lo pide para jugar. Está muy pendiente. Ve usted algún problema?

Respuesta de la terapeuta: A partir del desarrollo de la tecnología y la incursión de ella en los hogares, hemos observado un impacto en el sistema familiar como en los individuos.

La incorporación y el fácil acceso de la tecnología como un medio de información, comunicación, actualización y entretenimiento, se ha convertido en una herramienta para ser utilizada en el momento que se requiera.

Hemos observado que mientras más sofisticado, por rápido acceso, tamaño para ser llevado encima, conexión en cualquier lugar de la casa, escuela u otro espacio público, crea la idea de que se puede estar conectados en cualquier momento y tener respuesta rápida, llegando a la satisfacción instantánea de acuerdo a la demanda.

Los niños se inician con juegos de entretenimiento o educativos.

Las implicaciones del uso del Ipad, Laptop, BlackBerry, Iphone para el ser humano, independientemente de su salud, pueden observarse desde diferentes perspectivas.

Primero, son herramientas que promueven un nuevo conocimiento y una reestructuración a nivel cerebral, ya que estas han desafiado a usar los dedos, aprendizaje de nuevos códigos, estudiar, investigar y socializar de formas diferentes a las acostumbradas. En este sentido se plantea un gran reto de aprendizaje.

Dificultades que trae la incorporación de estos sistemas de comunicación podrían ser las siguientes: aislamiento, priorizar más el estar en redes sociales o cualquier otra variante que estar en contacto con el mundo familiar que les rodea.

Si estos se convierten en un escape o evitación para no estar en una relación cercana y afectiva con los padres, entonces, aumenta la distancia.

Igual habría problemas si los niños encuentran más placer en estar «conectados», que  el placer que deviene  en cualquier relación humana, sobre todo con sus familiares.

Cuando los canales de comunicación humanos son sustituidos por el tecnológico se produce el riesgo de que el mensaje no se interprete adecuadamente, a consecuencia de que el niño no cultive la emoción que se quiere transmitir a través del tono de voz y los gestos faciales.

Modular y modelar el uso de estos será el reto. Valorar la relación familiar es vital.

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