CONSULTORIO DE FAMILIA

CONSULTORIO DE FAMILIA

Sicologa, Terapeuta familiar
Pregunta del lector: Cuando  niño y adolescente fui maltratado por mi padre. Dejó de hacerlo cuando crecí  y lo enfrenté. Le dije, ya no lo puedes seguir haciendo, ya soy grande y no lo permitiré. Quiero a mi padre, pero tengo mucho resentimiento con él. ¿Podré  superarlo?

Respuesta de la terapeuta: Si usted se propone superarlo, lo logrará. Puede elegir no actuar el resentimiento. Tiene a su favor el afecto que siente por él.

Le recomendaría  conocer la historia de vida de su padre. Cómo lo educaron, cuál fue el método de disciplina que  utilizaron con él. Cuáles fueron las carencias socio-económicas y afectivas.

Esto con la finalidad de comprenderlo. La historia de su padre  podría obtenerla  a través de  otros miembros de la familia, entre ellos hermanos, tíos, sus padres, si aún están vivos. Esto le ayudaría a humanizarlo.

Le sugiero ser cuidadoso al hablar con su padre, existiría la posibilidad de que él no esté consciente del malestar que le ha causado. Podría lamentar que usted esté así, pero no reconocer el impacto que esto le provocó.

Probablemente su padre estaría orgulloso de ver el resultado de su crianza aunque haya sido maltratante con usted. Los padres piensan que las pelas, golpes, castigos severos son estrategias de disciplina que forman muy bien a los hijos.

He escuchado de algunos padres decir: “si habiéndole educado fuertemente es así, imagínese quien sería hoy. Si no le hubiese pegado sería un delincuente”. Esto revela que él está convencido que su método de disciplina funcionó. Para el hijo podría tener otra lectura, “mi papá fue muy cruel conmigo”.

El mismo evento tiene dos interpretaciones antagónicas,  lo hace más complejo, pero no imposible de encarar.

Si los dos pueden hablar sin malestar  de la experiencia podría ser trascendente para ambos. Implicaría un reencuentro entre dos adultos pero con dos propósitos diferentes. El suyo es superar la adversidad, el pasado y el resentimiento. Para el padre podría ser una oportunidad para disculparse con  usted y explicarle  que su intención no fue dañarlo si no educarlo.

Transmita la información acerca de lo que siente como consecuencia del estilo de disciplina, no acuse, critique ni ataque. Su objetivo es liberarse de su resentimiento.

Me parece que lo más trascendental es que conozca bien su pasado, no repetirlo y superar a su padre cuando sea padre.

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