Pregunta del lector:

Tengo mucho interés en que mi relación de pareja funcione bien. Entiendo que ambos debemos estar comprometidos con el mismo sentir para lograrlo. Me gustaría que nos dé algunos consejos.

Respuesta de la terapeuta:

La buena actitud, la firme voluntad y el deseo de contribuir para fortalecer y preservar el vínculo en la relación de pareja son fundamentales. Con el amor no basta.

En primer lugar, hay que tomar en cuenta que son dos personas diferentes, pues poseen características distintivas que deben reconocer, considerar y aceptar, así como las actitudes, creencias o principios que los acercan o distancian.

No siempre la pareja tiene que pensar igual. Muchos creen que hay que renunciar a sí mismos, renunciar a su autonomía y principios para ajustarse al otro, sacrificando la identidad individual.

Ciertamente, en la medida en que se alcanza la madurez de la pareja, se crea un sentimiento de pertenencia que los une. Esta unión se hace más rica si ambos se comprometen con preservar su individuación, es decir, con no plegarse incondicionalmente con un comportamiento sumiso y servil.

La comunicación es un medio eficaz para mantenerse en contacto, expresar sus ideas, convicciones, valores y principios. Además, permite negociar y lograr acuerdos sin imponer ni silenciar.

También es recomendable que tengan temas comunes y planes a corto, mediano y largo plazo que beneficien a ambos. Esto les permitirá trabajar hacia un fin en conjunto.
La expresión afectiva fortalece el vínculo emocional. Los abrazos, las caricias y los besos estimulan hormonas que generan buenos efectos, incremento de la sensación de sentirse amados, deseo de estar juntos y alegría.

Además, es un medio que propicia el buen encuentro sexual, pues la pareja se prepara gradualmente para el disfrute pleno.

La respuesta sexual en la pareja va más allá de la penetración, es toda conducta que estimule las sensaciones corpóreas que acerquen físicamente. El juego erótico incrementa las fantasías sexuales y los cuerpos tendrán mejor receptividad para el disfrute con libertad.
Por otro lado, mantener una relación armoniosa con la familia de la pareja crea un marco de respeto y aceptación mutua.

El compromiso de ambos para mantener la buena administración de las finanzas reducirá el grado de tensión, sobre todo en estos tiempos de pandemia.
Siempre reconózcanse, admírense y apóyense hasta en los momentos más críticos.