CONSULTORIO DE FAMILIA. «Mi esposo no quiere seguir conmigo»

CONSULTORIO DE FAMILIA. «Mi esposo no quiere seguir conmigo»

Pregunta de la lectora: Tengo 18 años de casada. He tenido un buen matrimonio. Mi esposo no quiere seguir conmigo. Dice que me quiere, pero que le hice mucho daño porque peleaba mucho. No perdona que en una discusión le dije que se fuera de la casa. Quiero que se quede. ¿Cree si se va, no volverá?

Respuesta de la terapeuta: Centrarse solo en el temor de que si se va, no volverá, es perder el punto de vista de lo que está pasando en la realidad emocional de la pareja.

La posibilidad de separación activa fuerzas emocionales que aumentan la necesidad de unión, intensificándose pensamientos y conductas para que el otro se quede. Pero, ¿qué sucede?, quien no está dispuesto a separarse comienza a buscar, acercarse, llamar y ser complaciente. Esto no hace más que distanciar a la pareja que se quiere ir, que podría pensar: “es demasiado tarde”.

¿Por qué aceptar que el otro se distancie? Porque esta decisión no es tomada en el momento, quizás, hubo un evento que activara el deseo de irse, pero no es así. Es probable haya estado planteándose esta situación por un largo periodo.

Una pareja puede, en un momento, decidir no continuar, independientemente de las razones que le motiven para hacerlo. Cuidado con el sentimiento de culpa. Son las motivaciones personales las que hay que tomar en cuenta. Estas acercan o distancian.

Cada pareja se va haciendo una idea del otro, partiendo de sus propias ideas. Obviamente que, la conducta y las expresiones emocionales reactivas: insultos, gritos, ataques a la autoestima, laceran emocionalmente al otro.

Otra forma de amar es ser comprensiva y empática con el que ya no quiere estar. Aceptar que terminó. Usted puede programarse para ir asumiendo esta realidad.

He visto en parejas, que se van dando a través del tiempo una reprogramación para distanciarse y dejar de querer al otro. Esto ocurre en sus pensamientos y sus comportamientos, el distanciamiento es gradual, aunque parezca fue una decisión repentina.

Aceptar esta realidad le tomará tiempo. Entiendo que no es fácil asumirlo.

Esperar que se quede en contra de su voluntad, podría generar en él conductas hostiles hacia usted, ante la sensación de incompetencia al no poder desvincularse definitivamente.

El amor no se impone, se da y recibe espontáneamente.

Así como una persona decide amar a su pareja, puede decidir lo contrario.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas