P: ¿Qué es una gastrostomía y cuáles sus indicaciones como vía de alimentación?

R: La gastrostomía es una comunicación del estómago con el exterior, a través de la cual se introduce una sonda para alimentar a los pacientes que no pueden hacerlo por la boca durante un período prolongado (mayor de 4-6 semanas, según la Sociedad Americana de Nutrición Enteral y Parenteral). Ejemplos: accidentes cerebrovasculares (embolia, trombosis o hemorragia cerebral), Alzheimer, Parkinson, pacientes críticos en ventilación mecánica prolongada, traumatismos craneales, demencia senil, pacientes comatosos o en estado vegetativo, parálisis cerebral, tumores de cabeza y cuello, obstrucción esofágica por cáusticos o tumores, grandes quemados, etc.

Hay dos grandes tipos de gastrostomías: endoscópica percutánea (PEG, siglas en inglés), y gastrostomía quirúrgica (GQ). La primera es colocada por un gastroenterólogo mediante un endoscopio y requiere una sedación breve; la segunda la pone un cirujano en el quirófano, mediante una incisión abdominal directa, utilizando anestesia general, por lo cual este procedimiento es más costoso y requiere más tiempo. Con frecuencia, los familiares de pacientes envejecientes, incapacitados para alimentarse por vía oral, se resisten a que se les coloque a éstos, una sonda de gastrostomía; ignorando que ésta vía de alimentación es muy cómoda y segura, permite mantener al enfermo bien nutrido e hidratado; y facilita la administración de medicamentos por la sonda.

La alimentación por gastrostomía ofrece las siguientes ventajas sobre la alimentación realizada por medio de otras sondas intragástricas introducidas a través de la nariz (sonda nasogástrica) o la boca (sonda orogástrica): reduce el riesgo de aspiración de los alimentos hacia los pulmones y la neumonía por aspiración (complicación muy temida porque puede ocasionar la muerte), debido a que el esfínter inferior del esófago permanece cerrado; la sonda de gastrostomía se obstruye menos porque tiene un diámetro mayor; se evitan las erosiones de la naríz, la sinusitis y la otitis; tiene menos riesgo de salirse accidentalmente, es más fácil de manejar y puede ocultarse debajo de la ropa.

La gastrostomía está contraindicada en casos de: supervivencia esperada menor de 6-8 semanas, riesgo de sangrado, insuficiencia cardíaca o respiratoria descompensada, peritonitis, diálisis peritoneal, cirrosis con ascitis o hipertensión portal.