P: ¿Qué es la enfermedad celíaca y cuál es su dieta?
R: La enfermedad celíaca, esprue no tropical o enteropatía sensible al gluten, es una enfermedad autoinmune muy común alrededor del mundo (1%), frecuente en personas de descendencia europea. Resulta de la interacción entre factores genéticos, ambientales e inmunológicos. Los sujetos con predisposición genética desarrollan inflamación y atrofia del intestino delgado al consumir alimentos que contienen gliadina (presente en el gluten del trigo) o prolaminas: hordenina (cebada), secalina (centeno) y avenina (avena). Aparece en los primeros 2 años de vida, a los 30-40 años o en cualquier momento. La mayoría de los pacientes son asintomáticos, lo cual retrasa el diagnóstico; pero una pequeña minoría presenta los síntomas gastrointestinales clásicos: dolor abdominal, flatulencia, diarrea y pérdida de peso.
El intestino delgado proximal (duodeno) se afecta con mayor severidad, debido a que es la primera parte del intestino expuesta a grandes concentraciones del gluten. También puede afectarse el yeyuno, y ocasionalmente, el íleon.
En algunos pacientes la enfermedad es descubierta por la aparición incidental de manifestaciones extraintestinales, tales como: anemia, falla para progresar en los niños, osteoporosis (por déficit de calcio y vitamina-D), fatiga o disfunción neurológica. Puede haber o no, una historia familiar de enfermedad celíaca, o la aparición de trastornos inmunológicos relacionados: dermatitis herpetiforme, epilepsia, diabetes tipo 1, hipotiroidismo, lupus eritematoso sistémico, epilepsia, síndrome de Sjögren, Down, etc. Algunos enfermos presentan síntomas dramáticos con cantidades muy pequeñas de gluten; mientras que otros, requieren cantidades mayores y los síntomas aparecen varios meses después.
El diagnóstico se hace por la desaparición de los síntomas con una dieta sin gluten; pero el patrón de oro diagnóstico es la biopsia intestinal (Organización Mundial de Alergia y Colegio Americano de Gastroenterología).
Manejo dietético:
1- Eliminar todos los alimentos que contienen trigo, centeno, cebada, avena y sus derivados.
2- Eliminar fuentes escondidas de gluten: proteínas vegetales hidrolizadas, saborizantes de malta, emulsificantes, vainilla, salsas, marinadas, espesantes y algunas pastas de dientes.
3- Consumir lácteos sin lactosa (si hay intolerancia); suplementos de calcio, vitaminas A y D; y disminuir las grasas (si hay diarrea por intolerancia).
4- Tratar la anemia con folato, hierro y vitamina B-12
5- Agua y electrolitos, en casos de diarrea severa.