Especialista en recursos naturales
P.- Sr. Martínez, cualquiera le compra todo lo que usted vende con sus palabras, sobre las áreas protegidas del país, pero cómo se puede comprobar si es cierto todo lo que nos cuenta, pues a lo que yo veo, eso de los parques nacionales, solo lo leemos y hasta lo escuchamos de su boca, pero a nadie más vemos en esos afanes, a no ser contradiciéndole?

R.- Dentro de breve tiempo, a más tardar un mes, la Sociedad Dominicana tendrá la oportunidad, no solo de ver imágenes de las riquezas naturales y su valor histórico indiscutible, sino de visitar y contemplar el enorme patrimonio natural, cultural e histórico que atesora la Provincia de Azua de Compostela, en el Parque Nacional Francisco Alberto Caamaño Deñó.

Hay un Rio Ozama que no conocemos, pero que en la Avenida del Puerto (Francisco Alberto Caamaño Deñó), cualquiera puede tomar una embarcación, del tamaño que quiera y después de recorrer 12 o 15 kilómetros,  puede adentrarse en los bosques de galería que conoció Cristóbal Colón y Nicolás de Ovando, con la misma originalidad y cubiertos por un “velo de ángel”, ambiente típico de la Selva Lluviosa Tropical que conforma el Parque Nacional Humedales del Ozama.

Esta no es promesa, sino un anuncio público para quienes no se han enterado que el “Parque Ecológico Manantiales del Cachón de la Rubia”, ha sido rescatado y totalmente habilitado para el baño y la recreación, donde todos los días y muy especialmente los fines de semana, se congrega una gran cantidad de visitantes de diferentes sectores de la capital dominicana y en particular, de Lucerna, Cansino, Los Minas, Las Brisas y su entorno.

Usted no tiene que pedir permiso, sino respetar la naturaleza, para visitar los sectores más espectaculares y representativos de los ambientes y recintos ecológicos que conforman el ámbito interior de los Humedales del Ozama, como el Sendero del Bosque Pluvial, la Laguna Dulce y Laguna Azul, Laguna Manatí y Laguna Flamenca, Laguna Alejandro y Rincón de Clara y muy especialmente, la inmensa Laguna Yuna, que tiene más de tres kilómetros navegables.

Y será cuestión de algunos meses, en que se termine de habilitar el “Parque Ecológico Los Ojos de Las Américas, donde existe un gran número de balnearios tan impresionantemente hermosos, que cualquiera dudaría que sean reales. ¡Pregunte cómo se llega a estos puntos y lo comprobará con sus propios ojos!