Especialista en recursos naturales
P.- Profesor, después de la crecida del Lago Enriquillo, ¿dónde ponen sus huevos los cocodrilos que allí tienen su hábitat natural?

R.- Yo supongo que en el mismo lugar donde siempre lo han hecho, en las playas de la isla Cabritos, en el interior del Lago Enriquillo; pero a ciencia cierta, no podría afirmarle nada, porque con la crecida del mismo, esta isla tiene inundado su litoral tradicional; es decir, las áreas de playa o arena de esta isla, utilizadas normalmente para la postura  de los huevos y la reproducción de esta especie tan singular de nuestra fauna, prácticamente han quedado bajo el agua.

Son muchas las interrogantes que en estos precisos momentos nos debemos plantear en el campo de la biología y de la ecología en términos generales, con respecto al Lago Enriquillo. Resulta sumamente valioso conocer el comportamiento de las diferentes variables físicas y químicas de este enorme cuerpo de agua. Hasta ahora solo nos hemos preocupado por su crecimiento vertical y horizontal, sin embargo, si este brazo de mar atrapado entre las sierras de Neiba y Bahoruco pasó de menos de 200 kilómetros cuadrados antes de las tormentas de Noel y Olga, a más de 300 kilómetros cuadrados, que es la superficie que tiene en la actualidad, son muchas las cosas que deben haber pasado o que pueden estar pasando en su dinámica natural.

Si  a veces la salinidad del lago ha alcanzado niveles que superan y hasta duplican la salinidad media del mar, ¿cuál será el grado que tienen sus aguas en estos momentos y cómo este parámetro habrá influido sobre las especies animales y vegetales que allí existen? Esta podría ser la primera interrogante entre las tantas que van a surgir de cualquier investigación que se haga al respecto.

 Lo del cocodrilo tiene una connotación especial por tratarse de un animal prehistórico con grados de amenaza muy preocupantes, en vista de que se trata de uno de los pocos espacios del mundo donde vive totalmente confinado y en condiciones muy distintas a las que normalmente le rodean en su ámbito de distribución sobre el planeta, donde el predominio son las aguas salobres o saladas, pero que tienen contacto con aguas frescas provenientes de las masas continentales.

Vamos a iniciar el monitoreo y a replantearnos el estudio amplio de los parámetros que definen las características físicas, biológicas y ecológicas de este ecosistema tan peculiar de la naturaleza dominicana.