Consultorio Ecológico

P. Profesor el Senado de la República acaba de aprobar la ley de aguas y ahora pasará a la Cámara de Diputados, ¿cree usted que por fin tendremos esta tan esperada norma para la gobernanza de este recurso vital para la República Dominicana?

R. Así es, los diarios traen la agradable noticia de que se ha aprobado la ley de aguas una vez más en el Senado de la República, esperamos que esta vez no se caerá en la cámara baja, porque hasta ahora, el juego de pin pon ha sido, aprobarla en una para que se caiga en la otra y así ya tenemos 22 años en este jueguito.

El compromiso de algunos congresistas es que antes de concluir la presente agenda legislativa, el Congreso finalmente la apruebe antes de agosto y en seguida, la envíe al Poder Ejecutivo para su promulgación. De compromisos, allí nadie se muere, pues de eso se vive en los predios del Congreso Nacional. En caso de que nada se logre antes de agosto, que es lo más probable y se abra la nueva legislación, se aborde nuevamente el tema, con renovadas promesas y el estreno de nuevos legisladores.
Por eso no nos sorprendería que los nuevos inquilinos de las cámaras congresuales, desde el primer día prometan lo mismo, pero que el próximo cuatrienio no les alcance el tiempo para arreglar el embrollo que reciben y puedan armonizarlo con el precepto constitucional y el mandato de la Ley Madre N- 64/00, sobre el carácter patrimonial de las aguas nacionales, evitando que la privatización sea la salida para quienes en todo ven una oportunidad de negocios.
Habrá que repetirlo mil veces a ver si entendemos que Haití está al lado y no tiene agua, que la únicas reservas seguras, las fuentes hídricas más expeditas, están de este lado de la frontera, en los parques nacionales Nalga de Maco, Sierra de Neiba, Sierra de Baoruco y Monumento Natural Las Caobas.
Necesitamos una ley sectorial de aguas que tenga como norte garantizar la Seguridad Hídrica Nacional, sin olvidar el compromiso hídrico con nuestros hermanos haitianos. Las áreas protegidas las cuidaremos como tacitas de porcelana, porque reforestar siempre será la respuesta, pero con resultados positivos al largo plazo.
Lo único Seguro que tenemos al alcance, son las alfombras verdes de Valle Nuevo, La Humeadora, Armando Bermúdez, ¿Manolo Tavares? y José del Carmen Ramírez…
¡Quiera Dios que en el 2020 tengamos por fin, la Ley de Aguas…!