P. Profesor, Naciones Unidas lamenta que el mundo ha fracasado en el intento de proteger su biodiversidad, pues los 150 países que en el 2010 se comprometieron cumplir con los 20 objetivos para salvar sus especies y ecosistemas, solo han cumplido parcialmente con 6 de ellos. En este sentido, ¿qué ha hecho la República Dominicana?

R. En 2010, 150 países reunidos en la ciudad japonesa de Aichi, se comprometieron realizar los mayores esfuerzos para salvar las especies y ecosistemas bajo peligro de extinción. Hoy, una década después, un estudio de la ONU descubrió que el mundo prácticamente no ha logrado cumplir con 20 objetivos diferentes para salvaguardar especies y ecosistemas y que de ellos, solo seis se “alcanzaron parcialmente” y el resto no.

El estudio establece que: “el esfuerzo global para salvar especies y ecosistemas bajo peligro de extinción, mayormente ha fracasado, dado que hábitats frágiles como los arrecifes de coral y los bosques tropicales están más amenazados que nunca”. “Si esto fuera una escuela y se tratara de exámenes, el mundo habría reprobado, dijo Elizabeth Maruma Mrema, secretaria ejecutiva de la Convención de Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica”, quien publicó el informe.

Gracias a Dios, ese no es el caso de la República Dominicana, pues desde 1995 hasta 2014, en dos décadas (19 años), nuestro país despertó del letargo u olvido del cuidado de la esencia de su naturaleza y ha emprendido los esfuerzos más grandes de su historia para salvar sus ecosistemas y especies más valiosas que tipifican su biodiversidad.

Los decretos 221-95 (2 Parques Nacionales y un Monumento Natural); 309-95 (3 Monumentos Naturales 5 Refugios de Vida Silvestre y 2 Vías Panorámicas); 233-96 (2 Reservas Científicas, 4 Reservas Biológicas, 6 Parques Nacionales, 7 Monumentos Naturales, 2 Refugios de Vida Silvestre, un Santuario de Mamíferos Marinos, 7 Vías Panorámicas, 5 Corredores Ecológicos y 3 Áreas Nacional de Recreo); 571-09 (2 Reservas Científicas, 2 Reservas Biológicas, 9 Parques Nacionales, 11 Monumentos Naturales, 2 Santuarios Marinos, 3 Refugios de Vida Silvestre y un Área Nacional de Recreo), 371-11 (un Parque Nacional) y la Ley 13-14 (un Santuario Marino).

La Ley 202-04 solo ratifica decretos anteriores y crea categorías confusas (Reservas Forestales y Reservas Privadas), no reconocidas internacionalmente (UICN). Con estas áreas protegidas (terrestres y marinas), el país cumple y supera las Metas Aichi, probablemente un caso único en el mundo. El desafío reside en redoblar esfuerzos para no caer en retroceso.