P. Profesor, ¿El Máximo Gómez es un Parque Nacional o una Plantación de Aguacate?
R. Ambas cosas a la vez y nos preocupa grandemente, porque se trata de un área protegida muy valiosa, desde los campos de la cultura, la historia, la conservación de la biodiversidad, las aguas nacionales, la generación hidroeléctrica y la agricultura que se desarrolla en las llanuras de Peravia y San Cristóbal. Es la Unidad de Conservación del SINAP (Sistema Nacional de Áreas Protegidas) dedicada a honrar la memoria del Prócer y Generalísimo Máximo Gómez, que comparten estas dos provincias, que nos correspondió trabajar con el Decreto 571-09 y que contiene una de las reservas estratégicas de agua más importante del país, pues la Presa de Valdesia (en su centro), es la fuente de agua que alimenta el primer y más grande acueducto de la República Dominicana (Valdesia – Santo Domingo), aportando 1,580 galones de agua por segundo (6 m3/s), para el suministro de agua potable a la capital y una pequeña porción para la ciudad de San Cristóbal.
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Pero aún más, este parque nacional también aporta sus aguas para la Presa Las Barías (contraembalse), la cual, a su vez, brinda sus aguas para alimentar los canales Marcos A. Cabral, quien irriga las tierras fértiles de Baní y a múltiples pueblos, secciones y parajes de la Provincia Peravia; así como el Nizao-Nahayo, que hace lo propio con las llanuras de San Cristóbal, CAEI, Yaguate y pueblos aledaños. Sin embargo, entre los valores más relevantes del Máximo Gómez, que sucumbiendo y arruinando ante las plantaciones de aguacate, se encuentra el “Centro Ceremonial Taíno de la Cueva de Mana”, entre otras cavernas históricas (Las Caritas), con una riqueza pictográfica única en el Caribe Insular, como tesoro aborigen irremplazable.
¡Es tiempo para reflexionar…!