Consultorio Ecológico: Recursos Humanos para ordenamiento del territorio

Consultorio Ecológico: Recursos Humanos para ordenamiento del territorio

Eleuterio Martínez

P. Profesor, ¿ordenamiento del territorio desde Los Ayuntamientos dice usted?, ¿pero con cuales recursos humanos se cuenta?

R. Sí, así debe ser, porque los Ayuntamientos son los Gobiernos Locales, los que están día a día en el territorio y en contacto con la gente en procura de su desarrollo o porvenir. Ahora, estoy consciente de que la gran limitante o el vacío casi insalvable, es la falta de conocimientos técnicos.

¿Qué puede hacer un Ayuntamiento que apenas cuenta con un Departamento de Planificación Urbana, en el mejor de los casos y con una Unidad de Gestión Ambiental, solo para cumplir con la Ley 64-00, pero que no tienen con qué pagar un equipo técnico especializado para estos menesteres científicos?

Puede leer: Consultorio Ecológico: ¿Cuál es el desafío mayor de los alcaldes?

Pero, precisamente, la Gobernanza del Proceso tiene que estar dirigido por el Ministerio de Medio Ambiente y el Ministerio de Economía y Desarrollo a la vez, porque a la hora de decidir, tiene que haber un equilibrio entre lo posible y lo que se quiere. Es decir, las Alcaldías no pueden trabajar solas, el acompañamiento económico, técnico y, sobre todo, de la gente, resulta indispensable; por lo que la sinergia “Medio Ambiente – Economía – Gente”, tiene que ser una ecuación entre “Potencialidades Naturales (primera razón), igual a Bienestar Social (resultado)”.

En otras palabras, mientras se hace el Ordenamiento Territorial Nacional, Regional o Local, tiene que establecerse vasos comunicantes para construir la viabilidad del proceso de planificación que, de ser así, el destino será, aquello que siempre está en el discurso político: “Desarrollo Sostenible”.

Este proceso que está impulsando el Presidente de la República, todos los actores claves tienen que estar bailando al mismo son y desde la Academia de Ciencias, vemos rezagado el componente ambiental…”.

Más leídas