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POR ODALIS MEJIA
El Departamento de Salud Mental de Salud Pública está preocupado por el alto consumo de alcohol y su relación con la violencia, ya que las 1,894 denuncias registradas de enero a julio en la Unidad de Niñez y Familia del Distrito Nacional todas están vinculadas con la ingesta de alcohol.
Así lo expresó Elías Tejeda, encargado del Programa de Alcohol y Drogas de Salud Pública, quien dijo que es urgente que las autoridades implementen más controles para el consumo y expendio de alcohol, por lo que se opuso a la flexibilización del horario de control anunciado por la secretaría de Interior y Policía para la comunidad turística de Cabarette, en Puerto Plata.
Recordó que la última encuesta Gallup arrojó que un 90% de las familias pidieron mantener las restricciones en la venta de alcohol y que de acuerdo a estadísticas del 2003 se consumía en el 70% de los hogares pobres, en un 23% en la clase media y un 7% en la clase alta.
Refirió además que una encuesta reciente a nivel de estudiantes universitarios reveló que muchos de ellos iniciaron el consumo de bebidas alcohólicas a partir de los 14 años y desde sus hogares, lo cual llama la atención ante la presencia de una cultura del alcoholismo.
Muchos padres incluso mojan un dedo y se lo dan al bebé de apenas meses porque es un problema cultural y estamos tratando de que se modifique esa mentalidad, haciendo conciencia de que el alcohol es una droga y las demás inician y terminan con el alcohol, advirtió Tejeda.
Según Tejeda, uno de los obstáculos para contrarrestar el alto consumo alcohólico es que como las bebidas se promocionan dentro de un marco legal, el trabajo de la prevención es mucho más difícil y complicado.
Ante esta situación compleja, Salud Mental ejecuta un programa de detección precoz de alcoholismo en los centros de atención primaria del Distrito Nacional para lo cual ha capacitado a 211 médicos con el objetivo de identificar a pacientes alcohólicos que lleguen a las consultas y enviarlos a grupos de ayuda.
También, ha iniciado ciclos de capacitación a magistrados y fiscales para enseñarles como abordar los problemas que se presentan con el alcohol y otras drogas.
Precisamente desde ayer y hasta hoy en la Universidad Católica de Santo Domingo, un grupo de médicos participaban en un taller para saber como enfrentar el problema. Las instrucciones estuvieron a cargo de los consultores de la Oficina Panamericana de la Salud, Paul Sealed y Maristela Monteiro.
De acuerdo con Sealed, el consumo de alcohol en América Latina está por encima de otras regiones, al ser el causante del 5.4% de las muertes, frente al 3.7% a nivel mundial. También citó que mientras la media en el mundo de consumo es el 6.2 litros por persona por año, en América es de 8.7 litros.
Citó también que el 20-50% de los accidentes de tránsito en América Latina están relacionados con el consumo de alcohol que además es el factor principal que ocasiona enfermedades y afecta seriamente a la salud mental.
