La gran cantidad de basura vertida en las cañadas El Pasito y El Ciguelillo, los residuos de lavado de vehículos y ropa en el río Yamasá y las aguas residuales y cloacales representan un grave problema de contaminación para los munícipes, en especial de El Recodo y Ciguelillo, que por falta de agua potable lo usan en sus necesidades básicas.
Todo esto preocupa a la población, pues como expresa el epidemiólogo Gumersindo de León, se corre el riesgo de contraer enfermedades como parasitosis intestinal, ameba y giardia; cólera, infecciones vaginales por tricomonas y monillias y hepatitis A. Cuando llueve, el agua arrastra toda clase de desperdicios sólidos, heces fecales, basura, aguas residuales que van directamente al río, donde los bañistas, aun sin proponérselo, ingieren agua en cantidades suficientes para contaminarse.
Habitantes de El Recodo y El Ciguelillo, comunidades cercanas al acuífero, y miembros de la Junta de Vecinos Mamá Tingó llaman a las autoridades a intervenir y buscar solución a ese problema que afecta a la comunidad de una u otra forma. Se quejan de que la situación les trae múltiples inconvenientes y expresan que los que más sufren son los niños.