DAJABÓN.  La Coalición por un Mercado Digno de Dajabón (Comerdi) y comerciantes de esta población fronteriza, alertaron sobre la contaminación, la corrupción y el desorden en el mercado binacional de  esta ciudad, que, según afirman,  opera en un terreno inadecuado para las actividades comerciales.

Los vendedores están ubicados en un solar adyacente, mientras se trabaja en la construcción de las instalaciones que albergarán el nuevo mercado fronterizo, pero se quejan de las pésimas condiciones en que han tenido que instalar sus puestos.

Cientos de casuchas, almacenes, casetas y lonas han sido levantados en el lugar, donde se concentran miles de personas los lunes y viernes, en medio de una laguna contaminada y con la carencia de baños.

Los vendedores expresan que esta situación obliga a dominicanos y haitianos a hacer necesidades fisiológicas en cualquier lugar que se les ocurra, incluso dentro del mercado.

Alfonso Cordero, vendedor desde hace 12 años, declaró que donde actualmente opera el mercado fronterizo la situación es insoportable, porque no hay organización, y a los clientes se les hace difícil localizar las mercancías.

“Las ventas han bajado en un 90 por ciento; hay muchos problemas, cañada, zanjas,  hoyos, y no nos sentimos bien, porque este lugar no está adecuado para la venta”, dijo.

El padre Regino Martínez, representante de Solidaridad Fronteriza y Comedi, denunció que las condiciones del mercado binacional son un desafío al cólera, porque las instalaciones son inadecuadas y las personas se debaten entre el lodo, la polvareda y las aguas negras de una cañada contaminada.

Dijo que las autoridades hicieron canales de desagüe dentro del solar, y esa agua es depositada en el río Masacre, lo cual aumenta la contaminación.

Informó que las nuevas instalaciones podrán albergar a 700 vendedores, pero, según sus cálculos, hay 3,130  comerciantes establecidos, por lo que considera  necesario ampliar la edificación.  “Hay que ampliar el  mercado hacia la parte Oeste;  hacia Haití, atravesando el río Masacre. Sería la única solución para ubicar más de 8 mil personas”, expresó el sacerdote.

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Hay un grupo de vendedores que no se pudieron instalar en el espacio habilitado para el mercado, porque, según dijeron, las autoridades municipales no los tomó en cuenta, pese a tener varios años siendo vendedores. Denunciaron que una sola persona puede tener hasta siete puestos de ventas, los cuales los ofrece a otros  hasta a 15 mil pesos.

“Los verdaderos comerciantes de Dajabón, que por años han sido vendedores de este pueblo, están fuera del  mercado. Hay quienes nunca habían vendido aquí ni siquiera un alfiler, y hoy ellos nos han invadido los puestos y quieren tener los mejores puntos”, denunció Norberto Rodríguez.