Continúan estables dos cuatrillizas

Continúan estables dos cuatrillizas

POR ALTAGRACIA ORTIZ GOMEZ
Continuó ayer mejorando el estado de los dos cuatrillizos prematuros que sobreviven a la muerte de los otros dos, quienes están bajo cuidado en el Hospital de la Mujer, según dijo ayer el director, doctor Angel Terrero.

En tanto, en el centro de salud preparan un informe que será remitido a la dirección del Instituto de Seguros Sociales (IDSS), a fin de preparar las condiciones para el parto de sextillizos que espera en las próximas semanas, Máxima Pérez, una madre de El Morro de Villa Mella.

«Están estables dentro de su estado, pero eso no significa que estén fuera de peligro», sostuvo el doctor Terrero en alusión a los dos cuatrillizos.

Insistió en que están bastante estables, es decir, que no hay cambios en su estado de salud, lo que a su juicio es muy importante.

Hace hoy diez días que nacieron los cuatrillizos, dos de los cuales murieron por hemorragia cerebral y pulmonar, mientras las dos hembras son atendidas por neonatólogos en el hospital.

Las niñas Lesli Michel y Diana Isabel, quienes están estables dentro de su gravedad, están siendo atendidas por un personal muy competente, dijo la doctora Leonora Expósito, encargada de Neonatología.

Añadió que se trata de menores cuyas estadísticas tienen más de un 80 por ciento de riesgos y que aunque se extremen los cuidados, no tienen sus órganos respiratorios desarrollados.

En el aspecto nutricional de los niños prematuros y cuatrillizos es fundamental la alimentación, no necesariamente para que ganen peso, sino como una forme de que no pierdan el que ya tienen.

Los cuatrillizos son hijos de Lisbel Binet Ventura, de 22 años de edad y estudiante de Mercadeo de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD)  y del técnico en computadoras Eduardo Canario, de 30 años.

La madre y el padre están integrados totalmente a la recuperación de sus hijos.

LOS SEXTILLIZOS

Con relación a la madre que espera sextillizos y que está ingresada en ese hospital, los doctores Dima de Moya y Angel Terrero llamaron a sus colegas gineco-obstetras para que sean más cuidadosos a la hora de superestimular los óvulos de una mujer.

En un parto de ese tipo debe haber médicos especialistas suficientes, perinatólogos, neonatólogos, gineco-obstetras y psicólogos, pues el parto de sextillizos de Pérez sería el primero y necesitará de una gran logística, se explicó.

Si se trata de una cesárea, explicaron, y deben estar todos los ventiladores y toda la tecnología para la cirugía disponible.

En el día de ayer, la madre estaba estable y descansada, por lo que los médicos esperan que pueda llegar a las 30 semanas.

Pérez, de 33 años de edad que espera sextillizos en los próximos meses, está tranquila y es asistida por un personal especializado, señalaron los directivos del hospital.

El médico de cabecera de la paciente es el doctor Joe Fernández, pero en la maternidad es asistida por todo un equipo de profesionales.

Se ha restringido un poco la visita de la paciente, quien necesita reposo y una dieta sin grasas, explicaron sus médicos.

Pérez, madre de una niña de cinco años de edad que ahora espera otros seis bebés, es ingeniera agrónoma, pero nunca ejerció la profesión.

No hay antecedentes en el país de que una mujer haya alumbrado a  seis hijos, ni haya llegado a la madurez del embarazo, por lo que se han extremado los cuidados en torno a esta madre.

Pérez fue ingresada el martes 29 de noviembre y tiene casi 26 semanas de embarazo.

La paciente recibió una inducción de su ovulación y los médicos presumen que fue con Clomifeno, un fármaco que estimula la ovulación.

CUIDADO CON LOS METODOS

Con relación a los métodos de estimulación de los óvulos de una mujer, los médicos llamaron a sus colegas a ser más cuidadosos a la hora de estimular, porque una mujer puede tener varios óvulos y eso complica el cuadro.

Explicaron que se debe hacer un estudio en el que se determine la cantidad de óvulos que tiene una madre y que el médico debe tener una comunicación más cercana con la madre.

Se refirieron a los constantes embarazos de mujeres que han intentado fecundarse o estimular sus órganos reproductivos.

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