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El pasado día 29 de mayo se inauguró el Memorial Museo de la Resistencia, que realmente es un Museo contra la desmemoria, gracias al respaldo recibido por el Gobierno que preside el doctor Leonel Fernández, con la colaboración de diversas Fundaciones Patrióticas, que acogieron la idea de hace muchos años de la famosa dominicana museóloga Luisa de Peña Díaz.
En este Museo se exhiben, bajo diversas modalidades, todo lo que representaron las luchas de los dominicanos por su libertad, desde 1916 hasta 1965, período durante el cual hay que incluir los horrorosos 31 años de la tiranía de Trujillo, quizás la más cruel que registra la Historia de nuestro país y posiblemente de la Humanidad.
El Museo cuenta con un apoyo visual y tecnológico de primer orden, desde fotografías y miles de documentos, los cuales están al servicio del público para su consulta, especialmente para los estudiantes, la mayoría desconocedores de aquella infausta etapa que constituyó la llamada Era del Oprobio.
Una de las muestras de la tecnología utilizada la representa la figura tamaño heroico de Manolo Tavárez, líder del glorioso Movimiento Clandestino 14 de Junio, donde aparece gesticulando al pronunciar su famoso discurso patriótico en el que consignó que el 14 de Junio sabía dónde estaban las escarpadas montañas de Quisqueya, para luchar desde ellas por la constitucionalidad castrada por el fatídico Golpe Militar que derrocó al primer Gobierno democrático presidido por Juan Bosch, después del ajusticiamiento de Trujillo.
La magia de la tecnología nos presenta la forma en que miles de mariposas se convierten en las figuras de aquellas tres hermanas brutalmente asesinadas el 25 de noviembre de 1960, que dejaron un mensaje antes de convertirse nuevamente en mariposas. Me refiero a Minerva, Patria y Minerva Mirabal, sacrificadas junto a su fiel chofer Rufino de la Cruz.
Este es el Museo más completo que existe y que recoge con fidelidad las luchas más difíciles de nuestro país para conquistar su libertad, la dignidad y la consolidación de la democracia que tenemos.
No cabe duda de que desde el punto de vista histórico, esta es una de las obras más importantes de las construidas por el Gobierno que preside el doctor Leonel Fernández, puesto que la misma contribuirá a crear conciencia entre las presentes y futuras generaciones, de que la libertad no es un regalo, sino sacrificio y deber.
Hay que dar las gracias también a todos aquellos países que se hicieron representar en la inauguración del Museo, para reforzarlo con su presencia y promoverlo a nivel mundial.
Exhortamos a todos los padres de familia para que lleven a sus hijos a este Memorial Museo de la Resistencia, en la seguridad de que aprenderán algo más de nuestras luchas libertarias.
