La Confederación Dominicana de la Pequeña y Mediana Empresa abogó porque de manera urgente se produzca un proceso de diálogo entre el sector privado, el Poder Ejecutivo, el Congreso de la República, los partidos políticos y la sociedad civil, con el propósito de diseñar una reforma fiscal adecuada.

Robert William Calderón, presidente de la entidad, consideró necesario ese diálogo a los fines de diseñar una reforma fiscal que vaya más allá de ser un instrumento de respuesta a la actual crisis y apertura comercial del país, y que sea un instrumento de desarrollo nacional que garantice la estabilidad económica y social por largos años.

Calderón resaltó que la actual crisis demanda de la adopción de medidas urgentes para hacer frente al déficit cuasi fiscal, y amortiguar la reducción de ingresos aduanales que se originarán por efecto del Tratado de Libre Comercio (TLLC) con los Estados Unidos.

» Dentro de cualquier proyecto de reforma -señaló- se debe tomar en cuenta las condiciones especiales que se necesitan para desarrollar las pequeñas y medianas empresas, las cuales poseen regulaciones y leyes de fomento diferenciadas en la mayoría de países dada su vulnerabilidad y a la vez su gran potencial de generar riquezas y empleos.»

Calderón, en un boletín, dijo que estas medidas deben ser equilibradas, a fin de no afectar extremadamente a los consumidores, quienes han visto bruscamente reducir su poder adquisitivo, factor del cual dependen igualmente las expectativas de retomar el camino del crecimiento económico.

Igualmente recomendó que de la misma forma en que se busquen nuevas fuentes de ingresos fiscales, se adopten medidas que controlen el gasto del gobierno, de forma que se puedan enfrentar por ambas vías las necesidades prioritarias de gastos y esto influya en la reducción de la tasa de cambio, lo que influirá positivamente en la estabilidad y crecimiento económicos.

Reiteró la necesidad que dicha reforma «sea fruto de un gran acuerdo nacional, por lo que ya es hora de trabajar ese tema despojándose cada parte de sus cachuchas partidarias y adoptando la del interés nacional.»