Una de las lecciones que los dominicanos deben aprender del temblor de tierra que devastó la capital haitiana el martes es tomar conciencia de que también el país será sacudido, en algún momento, por otro similar, previno ayer el ingeniero civil Rafael Corominas Pepín.
Los dominicanos deben vivir permanentemente preparados, porque en cualquier momento puede ocurrir un sismo, afirmó este experto en el tema y ex secretario de Obras Públicas.
Corominas Pepín, autor del libro Lecturas para la gente de un país que espera su terremoto, recordó que República Dominicana tiene una actividad sísmica grande.
Explicó que por esa razón ese evento podría ocurrir en cualquier lugar del país y citó, por ejemplo, la Falla Septentrional, que se extiende desde Montecristi a Samaná.
El país está montado sobre una serie de fallas que tienen las mismas características que la que produjo el terremoto en Haití, dijo.
Corominas Pepín resaltó incluso que la falla que ocasionó esa perturbación sale por Barahona y pasa al sur de la isla y se llama Fosa de los Muertos.
A su juicio, el desplome de los edificios en Haití fue causado por cuatro factores: el epicentro estuvo muy cerca de la ciudad, fue muy superficial, la magnitud (7.3) y la mala calidad de las construcciones.
Precisó que en una observación de los escombros se puede apreciar que no hay una varilla y las construcciones están apiñadas.
Sobre el país dijo que aquí hay miles de edificaciones que reúnen a muchas personas, como escuelas, hospitales, cuarteles militares e iglesias, las cuales fueron construidas antes de 1979, cuando fueron puestas en vigor las normas del diseño sísmico.
Pero, dijo, que con las técnicas actuales es posible reforzar aquellas construcciones, de manera que puedan resistir ese terremoto futuro sin hacernos daño.
Dijo que del Gobierno depende evitar o, por lo menos, disminuir los daños que podría causar en el país la sacudida como el que sacudió a Haití.
Corominas Pepín piensa que la norma de diseño sísmico vigente desde 1979 no se respeta totalmente en las edificaciones.
No cree que las torres de la Capital estén tan próximas como para que se produzca el efecto dominó por un terremoto de magnitud importante, aunque dijo que tiene sus temores sobre las que usan el primer nivel para parqueos.
Antecedentes
Principales terremotos
1562
Fueron destruidas Santiago y La Vega.
1614
Dañó de manera seria la ciudad de Santo Domingo.
1673
Murieron 24 personas y destruyó a Santo Domingo.
1946
Borró la comunidad Matancitas, en el municipio de Nagua.