POR JOSE ALFREDO ESPINAL Y ARIDIO PERDOMO
PUERTO PLATA.- El coronel Isabelito Gómez Marseyes, comandante de la Policía en el municipio de Sosúa, negó ayer ser responsable del desmonte ilegal de más de 2 mil árboles y de las amenazas de muerte contra el personal de Medio Ambiente de Imbert, como lo acusara la gerencia regional forestal Norte.
Como parte de la denuncia de amenaza de muerte y el informe del derribo de árboles llevado a cabo en una finca de la comunidad Novillero del municipio de Luperón, una comisión de Medio Ambiente y de la Policía, encabezaron ayer las investigaciones sobre la depredación ambiental.
La comisión la componen el teniente coronel del Ejército Yoyanny Tiburcio, gerente regional forestal e inspector de la Policía Ambiental, el procurador de Medio Ambiente de Puerto Plata, Jesús María Suero y el inspector forestal, César Gómez.
No es cierto que yo amenazara con quitarle la vida a los inspectores forestales, como tampoco es verdad que estaba realizando un desmonte con los árboles de mi propiedad. Fueron ellos que penetraron a mi propiedad, afirmó el coronel Gómez Marseyes.
Yo iré a la justicia y estoy dispuesto a defenderme porque no es cierto la acusación que me hacen, señaló el oficial.
El oficial Gómez Marseyes dijo que la finca donde se hizo el desmonte es propiedad de un señor al cual identificó como Saúl Cruz, un hacendado que supuestamente posee una finca al frente de la suya.
Pero, según versiones de moradores de la comunidad El Novillero, de Luperón, el coronel Gómez Marseyes se ha apoderado de algunos terrenos en este lugar haciendo uso de su poder como oficial de la Policía.
Dijeron que el coronel Gómez Marseyes ni siquiera posee los documentos que le acrediten como dueño de la propiedad, a la que no permitió la entrada de inspectores forestales debido a los desmontes de árboles.