POR LLENIS JIMENEZ Y ELVIS LIMA
Luego de ocho horas de interrogatorios, el fiscal de la provincia Santo Domingo, Perfecto Acosta, dejó detenido anoche al coronel de la Fuerza Aérea Dominicana (FAD), Pablo Leonel Velázquez Tavárez, tras encontrar indicios que lo comprometen con la muerte a tiros del mayor de esa institución castrense,  José Manuel Herrán Mancebo. El magistrado declaró que debido a esa situación, hoy pedirá medidas de coerción contra el inculpado en el juzgado de instrucción.

 “Este es un caso difícil y complejo, pero hay indicios que comprometen su responsabilidad. Todo luce indicar que se trató de un crimen pasional”, dijo Acosta, luego del interrogatorio que se prolongó por más de ocho horas.

De su lado, el abogado de Velázquez Tavárez, Carlos Balcácer, consideró débiles los argumentos utilizados por la Fiscalía contra su defendido, porque, según sostuvo, hasta el momento nadie ha presentado testimonios que lo comprometan con el crimen.

Sin embargo, admitió que existía un vínculo sentimental entre la esposa del coronel y el mayor fallecido Herrán Mancebo.

“Ella confirmó en un interrogatorio que hubo un cruce de cartas y sentimientos entre ella y Herrán”, manifestó Balcácer.

MOMENTOS DE TENSION

Tras el interrogatorio, momentos de tensión se vivieron en las inmediaciones de la Fiscalía, luego de que familiares y amigos de la víctima se lanzaran contra el vehículo en que Velázquez Tavárez sería llevado a la cárcel pública de la Fiscalía de Santo Domingo, a quien le lanzaron objetos e improperios.

Aunque el coronel fue sacado bajo estrictas medidas de seguridad, a la hora de abordar el vehículo éste tuvo que partir con pocos agentes y con las puertas traseras abiertas, ante la furia mostrada por los allegados de la víctima.

Para frenar a los furiosos, los pocos agentes que lograron permanecer cerca de las puertas tuvieron que recurrir a su arma de reglamento, con la cual les apuntaron.

Velázquez Tavárez, quien por este caso está suspendido en sus funciones, se presentó a la oficina del fiscal Acosta alrededor de las 9:00 de la mañana en compañía de su abogado Balcácer y minutos después llegó el consultor jurídico de la FAD, coronel Ángel Zacarías Metz, quien junto a otro oficial identificado como el general Frank Schifino, presentaron al Ministerio Público un oficio de la institución castrense referido al caso.

 Zacarías Metz participó en el interrogatorio de 10:30 de la mañana hasta las 2:15 de la tarde, cuando se despidió registrando un informe con la secretaría del fiscal.

La entrevista fue efectuada en presencia del abogado del coronel, quien dijo que el oficial se presentó por ante el fiscal en forma voluntaria, pese a que su suspensión fue solicitada en el oficio dirigido al jefe de las Fuerzas Armadas, almirante Sigfrido Pared Pérez.

Habla el acusado

De su lado, el coronel Velázquez Tavárez declaró que nada tiene que ver con la muerte del mayor ocurrida el pasado 29 de diciembre, cuando se desempeñaba como jefe del comando de seguridad de base de la FAD.

Pese a que la viuda, Maybé Guerra, lo acusa del hecho, afirmando que la razón se debió a problemas pasionales con su esposa, Velázquez rechazó que estuviera celoso de su mujer con el mayor.

Afirmó que no convivía con su esposa desde hacía cerca de dos años y que volvió a la casa para ayudarla con la responsabilidad del hogar, por entender que no le era fácil lidiar con tres hijos.

Los familiares del mayor acusan al coronel alegadamente de haber pagado RD$300,000 para que cometieran el crimen. Por esta muerte guardan prisión preventiva el ex teniente policial Miguel Reyes, el cabo del Ejército José Luis Liberato y el civil Guillermo Germán.

La señora Guerra sostuvo que si el coronel no tiene nada que ver con la muerte de su esposo, ¿por qué se presentó a la Fiscalía con abogado?.

PEPE GOICO, AMIGO

En tanto, el coronel retirado Pedro Julio Goico Guerrero, ex jefe de la avanzada presidencial del ex presidente Hipólito Mejía, se presentó a la Fiscalía aproximadamente a las 9:30 de la mañana, aclarando que se trataba de un gesto de solidaridad con el acusado, a quien con un abrazo le dijo que  no se preocupara, que no tendría problemas y que saldría bien, debido a que estaba siendo defendido por el mejor abogado, Balcácer, quien también lo defendió a él.

Goico Guerrero, a quien recientemente se le conoció un caso acusado de lavado de activos, en el expediente del extraditado ex capitán Quirino Ernesto Paulino Castillo, cuya libertad obtuvo bajo fianza, le planteó a Velázquez Tavárez que él recobró su libertad y que él también saldría sin inconvenientes.

Pepe Goico estuvo tranquilo y muy conversador con los periodistas, a quienes afirmó que les ponía zancadillas en el Palacio Nacional, pero que ahora cambió el trato.

Se preguntó por qué los periodistas no le ponen los micrófonos en la boca al presidente Leonel Fernández, como lo hacía  al ex presidente Mejía.

Se refirió a que no tiene miedo de ser llevado preso, ya que lo han conducido y no se ha asustado, aunque añadió que el fiscal fue a su casa “con un regimiento, 5,000 hombres y no me asusté”.

Criticó que cuando Mejía inauguraba alguna obra los periodistas le hicieran preguntas que no estaban relacionadas con el trabajo del día.

 Habló de tecnología en las casi dos horas que permaneció en el lugar y de que el extinto presidente Joaquín Balaguer, en 22 años de gobierno, inauguró 17 comedores económicos y en la actualidad no quedan cinco.

Recordó la frase de quienes beneficiándose de las fundas que con alimentos daba Balaguer, decían: “Le cogemos la fundita y no somos reformistas”.

También se refirió a que sabían con antelación las preguntas que estos le iban a hacer al ex presidente Mejía, porque le intervenían los teléfonos y se quejó de la alegada negligencia con que actuó en el pasado gobierno un director de Información y Prensa de la Presidencia.