QUITO. El presidente de Ecuador, Rafael Correa, denunció el miércoles los «excesos» en los que ha incurrido la justicia italiana en la aplicación de una ley de protección de menores, que han llevado a que migrantes ecuatorianos pierdan la custodia de sus hijos.

«Creemos que hay excesos, que la ley es muy dura, con todo respeto para Italia, por eso estamos dando todo el respaldo a todas nuestras compatriotas», dijo Correa a la prensa a su llegada de un viaje oficial al país europeo. El mandatario informó que sostuvo una reunión «muy intensa» con migrantes ecuatorianos afectados por esa normativa, y que están recibiendo apoyo del gobierno para recuperar la custodia de sus hijos o evitar que se los retiren.

«Respetamos mucho a Italia, pero nos parece que las leyes italianas son muy fuertes en este sentido. El separar a unos hijos de sus padres no es la última opción, pareciera que fuese la primera», cuestionó Correa.

Al respecto, agregó que el sistema de asistencia familiar italiano ha resuelto en varios casos «separar» a un hijo de la familia por «cualquier problema intrafamiliar». «Pero no sólo eso: durante 40, 50 días, los padres de familia ni siquiera saben donde están, no se les dice donde está sus hijos. Tenemos una madre ahí que por castigar físicamente a su hija se la separaron seis meses y nunca la pudo ver», sostuvo Correa.

Desde junio de 2014, el gobierno de Ecuador ha ofrecido asistencia legal y sicológica a más de un centenar de familias de migrantes que enfrentan problemas con la custodia de sus hijos en Milán, Génova y Roma.
La justicia italiana ha devuelto desde entonces la custodia a sus padres de 16 niños, según la cancillería de Quito. Correa insistió en cuestionar las «acciones desproporcionadas» contra familias.

«Lo que hay que dar es asesoría a la familia, a no ser que sean casos mucho más graves, agresiones sexuales, etcétera. Pero además si un padrastro abusa de su hija que se la separen de la madre se le hace un mal mayor», dijo. Destino de miles de migrantes ecuatorianos desde finales de los noventa, Italia cuenta con una estricta ley de protección de menores que permite el retiro de la custodia a los padres por abuso de la patria potestad, violencia intrafamiliar o «conducta perjudicial».

El gobierno italiano no se ha pronunciado por las recientes declaraciones de Correa, pero en pasados meses la embajada italiana en Quito negó a la AFP que la legislación esté dirigida a castigar a los migrantes ecuatorianos, y enfatizó que las mismas leyes aplican para los italianos.