QUITO.  AFP.  El presidente de Ecuador, Rafael Correa, radicalizará su proyecto socialista tras la rebelión policial que denunció como un intento de golpe de Estado, dijo ayer  el canciller Ricardo Patiño, quien admitió que la crisis aún no ha terminado.  

«Lo que se tiene que esperar al salir de este episodio es la radicalización, la profundización de la revolución», señaló el canciller a corresponsales extranjeros al ser interrogado sobre la actitud que adoptará el gobierno tras la insurrección del pasado jueves que dejó 10 muertos y 274 heridos.   Patiño indicó que eso se deberá ver reflejado en medidas que profundicen la equidad, el «acceso de los campesinos a los medios de producción» y al crédito, y el aumento de la inversión social.   Habrá «mayor radicalización y profundización del proceso», subrayó. 

Extiende estado de excepción.-  El gobierno extendió el estado de excepción hasta el viernes, el cual había decretado por cinco días el jueves pasado a raíz de la sublevación.

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Apresan uno ligado a Lucio

Las autoridades de Ecuador detuvieron ayer  a un activista político cercano al ex presidente Lucio Gutiérrez, dentro de las investigaciones por la rebelión policial del pasado jueves que el gobierno denunció como un intento de golpe de Estado.  Fidel Araujo, un mayor en retiro del Ejército, fue arrestado por miembros de la Policía Judicial en Quito, dijo a la AFP una fuente de la Fiscalía, que ordenó la captura preventiva del militar con fines de indagación.  Correa denunció que Araujo, militante del partido Sociedad Patriótica (SP) de Gutiérrez, coordinó acciones dentro de la insurrección del jueves pasado.