El empresario José Luis Corripio afirmó ayer que todo préstamo, sea para el sector público o para el privado, tiene que tener un efecto compensatorio o multiplicador.
Alertó sobre la conveniencia de evitar que el endeudamiento solo pueda servir para posponer la crisis por incapacidad para reproducir los ingresos y pagar la deuda.
Pepin Corripio fue el orador invitado en el almuerzo de la Cámara de Comercio Domínico Mexicana. Se refirió al tema de los préstamos de ajustes con el FMI.
El empresario José L. Corripio Estrada expresó ayer que confía en que en el uso del financiamiento externo se evite que, en un futuro, cuando los otros países estén saliendo de la crisis, se cree en el país una situación especial, quizás por la incapacidad de reproducir los ingresos para pagar la deuda.
A propósito de los recursos a los que tendrá acceso el Gobierno a través del Fondo Monetario Internacional (FMI), Corripio Estrada explicó que los préstamos no pueden ser manejados de una forma tal que pospongan la crisis para el futuro.
Al ofrecer una charla como orador invitado en un almuerzo de la Cámara de Comercio Domínico-Mexina, el empresario puso como ejemplo que un préstamo en una institución pública, privada o en una familia que no tenga un efecto compensatorio y multiplicador, es un grave peligro porque, tarde o temprano, aparecerá la crisis o el problema.
No obstante, consideró que la República Dominicana se ha manejado bien en la crisis, ya que el peso dominicano se ha mantenido bastante estable.
Contrario a la opinión de algunos sectores, que sugieren devaluar el peso dominicano, Corripio Estrada entiende que este tema tiene que manejarse con mucha cautela, porque una devaluación puede favorecer a un sector de la economía pero perjudicar a la inmensa mayoría de la gente, que es compradora, y usa el peso como su fuente de abastecimiento. Reconoció el papel que debe jugar el Estado al aplicar políticas que vayan en auxilio de la clase más necesitada, pero aclaró que la ayuda gratuita puede ser peligrosa, por lo que sugirió que toda ayuda tenga a cambio una compensación.
Dijo que el país tiene algunos problemas que, necesariamente, no tienen que ver con la crisis, pero que son problemas que por la población estar ya tan acostumbrada a verlos y a oír hablar de ellos han perdido impacto. Corripio Estrada señaló, entre ellos, el de la inmigración haitiana, el narcotráfico, la corrupción, la deficiencia del sector eléctrico y la seguridad.
Dijo que por la falta de valores en la sociedad, la corrupción ha devenido en un problema metastásico, porque la generalidad de la población desea, más que combatirla, suplantar a los corruptos.
En cuanto a las causas de la crisis financiera internacional, Corripio Estrada consideró que en un 50% tuvieron su origen en los problemas financieros y económicos, y el restante 50% por el temor que se generalizó en todo el mundo, que la agravó de tal forma que hizo quebrar bancos y grandes corporaciones.
Hoy en día percibo que la crisis financiera ha mejorado algo en el mundo entero, en términos generales, pero no en la misma medida en que sí mejoró el temor, porque el temor se ha ido perdiendo ante la evidencia de que lo peor está pasando o va a pasar, y entonces vuelve otra vez el afán de lucro, y la gente no quiere llegar tarde a la fiesta. Dijo que eso explica el alza que ha vuelto a tener el Dow Jones.
Aboga por cultura exportadora
El empresario José Luis Corripio Estrada también favoreció la promoción de una cultura exportadora en el país y la aplicación de políticas que apoyen a la pequeña y mediana empresa.
Al ser entrevistado por periodistas previo a su charla en el hotel Jaragua, el empresario dijo que el país debe trabajar para contar con un sector exportador fuerte.