Afirma que esa entrega tiene que ser reconocida por todos, ya que no es fácil darlo todo por el voleibol y sacrificar esa parte

Las jóvenes mayor de edad, su gran deseo es tener un hijo, para disfrutar de la dulzura y el cariño que reciben de su progenitor.

“En el deporte y en especial el voleibol actividad que realice por muchos años, las jugadoras han tenido que dejar de tener hijos, para dedicarse a tiempo completo para representar su país, en los eventos internacionales, algo que deseamos, pero entre entrenamientos, fogueos y eventos nacionales e internacionales nos lo impide ser madre por el momento”, apuntó la inmortal Corsiris Rodríguez, al ser entrevistada en el Diálogo con los Deportistas, del periódico Hoy, que conduce Franklin Mirabal, editor Deportivo.

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Dijo que cuando “uno va a tener un hijo, entre el embarazo, tener el hijo, tres meses del cuidar el bebe y entrenar de nuevo, le lleva mucho tiempo”.

“Por estas razones no limitamos a tener un hijo, en el tiempo de su participación en la selección nacional”, dijo. Indicó que logró tener su hijo, luego de retirarse, llegando a un edad un poco avanzada, pero cuando se tiene deseo, es pedirle a Dios tener sus hijos que lleguen en salud, para disfrutarlo.
Las voleibolistas cuando deciden tener hijos, es en el momento de su retiro, para disfrutar su vida y estar con su familia y sus amistades.

Corsiris , en su brillante carrera contribuyó notablemente para que la Selección Nacional de mayores ganara medalla de oro y plata en Juegos Centroamericanos y del Caribe, que tuvo lugar en Maracaibo ’98, Venezuela, y el título en los Centroamericanos del 2006 escenificados en Cartagena de Indias, Colombia.

Señalada como una de las mejores rematadoras nacional e internacional de su generación, se caracterizó siempre por ser una jugadora aguerrida, decidida y sobre todo una gran motivadora dentro y fuera de la cancha, con varias medallas ganadas.